No te signifiques (31)

Por Jorge Díaz.

 

–          ¿Me quieres?

 

–          No.

 

–          ¿Me quieres?

 

–          No

 

–          ¿Me quieres?

 

Ya, pesado, no lo preguntes más, eres patético. La chica no te quiere, lo preguntes las veces que lo preguntes. El ridículo no es que te vuelva a decir que no, el ridículo es que lo vuelvas a preguntar. Más aún si cada vez que lo haces te dejas una pasta en regalos.

 

El alcalde es de esos que cree que va a acabar llevándose a la chica a la cama por insistencia.

 

–          A ver si la cojo un día de bajón y me dice que sí.

 

O de los que creen que el portero del garito les va a dejar pasar un día que le pillen desprevenido.

 

–          Con calcetines blancos no se puede entrar.

 

–          No son blancos, son azul celeste.

 

–          Váyase por donde ha venido.

 

¿Cómo nos van a dar los juegos olímpicos si no tenemos una miserable sombra para los que corren maratón, que nuestro fenomenal alcalde ha mandado talar todos los árboles?

 

–          El Comité Olímpico valora la perseverancia…

 

Patético, más penoso aún que ser un pesado es ser de los que ligan esperando el rebote. O de los que se meriendan los restos del banquete.

 

–          Sí, mucho insultar a las hienas en los documentales pero se hartan a comer y están partiéndose de risa todo el día.

 

El alcalde de Madrid parece uno de los payasos de la tele.

 

–          ¿Se va a presentar Madrid a las Olimpiadas 2012?

 

–          ¡Sí!

 

–          Más fuerte, que no lo he oído. ¿Se va a presentar Madrid a las Olimpiadas 2016?

 

–          ¡Siii!

 

–          Más fuerte, que no lo he oído… ¿Se va a presentar Madrid a las Olimpiadas 2020?

 

–          ¡¡¡Siiiii!!!

 

–          Ahora vamos a cantar todos juntos: mi barba tiene tres pelos, tres pelos tiene mi barba…

 

Y su colega, el del apellido raro, que la única actividad que se le conoce en la vida es ver partidos de tenis, le dice que sí, que él también quiere Juegos Olímpicos.

 

–          Vale, así puedo seguir viendo partidos.

 

–          Eso se te da muy bien.

 

–          ¿Verdad? Sigo siempre la pelotita y si gana un español aplaudo.

 

Dicen que no nos va a costar ni un euro, que las infraestructuras están hechas.

 

–          ¿Sí? Pues yo vivo en la zona centro y no hay áreas deportivas. Ninguna, había una piscina y la tiraron.

 

–          Los nadadores no iban a competir en la zona centro.

 

–          Pago mis impuestos para que hagan piscinas en las que pueda nadar yo, no para que lo haga Phelps. Él ya tiene donde nadar, él está harto de ir nadando de un lado a otro.

 

–          ¿No quieres ver a los mejores deportistas del mundo en tu ciudad?

 

–          Sí, por eso me alegro cuando los ficha Florentino.

 

Y además, lo caro a estas alturas no son las infraestructuras, son los viajes que se pegan de ciudad candidata en ciudad candidata. Lo que nos cuesta traer a los que deciden dónde se hacen los Juegos a dormir en hoteles en los que se cambian las sábanas a diario, a pasear en coche oficial y a comer en restaurantes que no tienen menú del día.

 

–          Eso es el chocolate del loro.

 

Llevamos pagándole chocolate al loro desde Madrid 2012, después, aunque tocaba que las Olimpiadas fueran en América, el señor de las cejas de velcro decidió que nos presentábamos: Madrid 2016, tengo una corazonada. Ahora, que no está claro que haya candidatos africanos, más chocolate para el loro: Madrid 2020, tengo una cabezonada… Todavía nos gana Nairobi.

 

Por favor, no volváis a votar nunca a un tipo con cejas raras.

 

Total, para que Alberto de Mónaco pregunte no sé qué que no se podía preguntar. Que ya hay que ir bien preparado para no saber contestarle, con la pinta de intelectual que tiene su alteza serenísima…

 

¿Es justo tener un alcalde que te haga desear marcharte de tu ciudad?

 

Que ya sé que la gente le vota, que si no le votara no estaría ahí, que tiene mayoría absoluta y la lleva teniendo desde que se presenta. ¿Y qué? ¿Dejará de ser un mal alcalde por eso?

 

¿Es justo que desees que su partido gane las elecciones y le hagan ministro o vicepresidente o embajador en Londres o lo que quiera y nos deje en paz a los madrileños?

 

Si hasta su segunda me parece mejor que él, aunque se apellide Botella y esté casada con quien está casada.

 

No voy a ir a abuchearle a la puerta de su casa. Soy una persona de bien y me basta y me sobra con dar mi opinión aquí. Pero que nos deje en paz, por favor.

 

Y ahora vacaciones hasta septiembre, ¿no os parece?

 

One thought on “No te signifiques (31)

  • el 27 julio, 2011 a las 8:53 am
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    Y también tiró las instalaciones deportivas de Virgen del Puerto para hacer Madrid Río, que digo yo que podría haber vuelto a ponerlas, que no iban a quedarle mal. Pero el deporte sólo es importante si lo hace gente para la que hay que pagar entrada para ver.

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