Completo (poético) por un euro

 

Ana María Caballero. Barcelona

 

Prostíbulo poético.
Prostíbulo poético.

Como en cualquier burdel convencional, los poetas del Prostíbulo Poético se pasean entre las mesas buscando algún cliente. El servicio completo es una poesía por un euro, aunque suelen caer algunos versos más de los convenidos. “Se trata de vender sexo intelectual” nos confiesa Madame Eva (Kiely Sweatt) quien trajo este formato poético a Barcelona ahora hace casi cuatro años. La idea surgió por primera vez en Nueva York; los integrantes del Poetry Brothel buscaban una nueva forma de recitar poesía que consiguiera atraer otro tipo de público. Según Madame Eva, “en una lectura normal está el poeta solo en el escenario frente al público; no hay conexión, mucha gente incluso no presta atención”, por ello, en el Prostíbulo Poético, la lectura es íntima; el poeta prácticamente susurra al cliente en el oído. “Intentamos recrear el burdel de vanguardias con putas y artistas” explica Madame Eva. La conjunción de poesía y sensualidad se palpa en el ambiente. Tras una introducción musical, con la banda de jazz y blues Skedaddles, los prostitutos y prostitutas se presentan en el escenario y dejan claro qué verso calzan. A partir de este momento, los clientes pueden adquirir las fichas de un euro y acercarse a sus preferidos. Inevitablemente, algunas de las prostitutas-poetas atraen más clientes que otros. Un corro de mujeres escuchan con atención al Sr. Bombín, un viejo poeta disfrazado de clérigo; cerca de él, otra madame muestra sus virtudes líricas a una pareja. Pese a la caracterización de personajes, saben que no son actores, son poetas, algunos más amateurs que otros, pero todos con el mismo objetivo: acercar la poesía al mayor público posible y, de paso, pasar un buen rato. Entre cita y cita, corren las copas de cava mientras los poetas explican anécdotas e intiman con sus clientes. Unas risas se oyen al fondo del local, la rima fácil de un joven poeta y sus versos porno-eróticos han arrancado las carcajadas de una muchacha. En la otra punta de la barra, una poetisa canta los últimos episodios en Grecia; la actualidad política también está presente en la lírica. En ese mismo instante, otra madame se sube al escenario y canta sus propios versos. El caos burdelesco se apropia del local. Es una noche en el Prostíbulo Poético.

 

El Libro Rojo

Parte de los beneficios recaudados en cada actuación se destinan a la publicación en libro de los poemas recitados. La última edición, el Libro Rojo, puede adquirirse en el próximo espectáculo o por Internet.

 

Prostíbulo Poético en Madrid

Las actuaciones no tienen fecha ni lugar fijo. El colectivo rota por los locales nocturnos de Barcelona y, desde hace unos meses, también ofrece sus servicios en Madrid. Para próximos espectáculos, puede consultarse la web oficial del Prostíbulo Poético.

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