Albert Camus, extranjero de la vida y el mundo

Por Pilar Martínez.

Hablar de la «filosofía de lo absurdo», es hablar de uno de los novelistas, ensayistas y dramaturgos más importantes de la literatura.  Con un estilo vigoroso y conciso, Albert Camus se erigió como uno de los escritores posteriores a 1945 más influyentes de todos los tiempos. Tal fue la envergadura de su obra que se consolidó como uno de los afortunados en recibir un premio nobel de literatura, en su caso en 1944.

Se convirtió en un referente para la intelectualidad francesa hasta su prematura muerte, para ello se valió no solo de sus trabajos periodísticos, sino también de sus completas y definidas obras. Su afición por el teatro fue el aliño perfecto a una vida dedicada al arte y la literatura.

Certero, conciso, Camus sentía un extraño vicio en su vida, y era el vicio por la sinceridad, la cual se convirtió en un rasgo principal en todas su obras. Tras quedar huérfano de padre, se crió con su madre y abuela. Su vida estuvo marcada por la tuberculosis, enfermedad que nunca llegó a superar y por una de sus más importantes y trascendentales decisiones, que no solo marcaron su vida, sino también sus extensas creaciones, esta fue el matrimonio con una joven adicta a la heroína.

Entre sus principales novelas encontramos El extranjero, obra que se erigió como el caballo ganador en la obra del escritor y como una de las novelas en el mundo de la literatura. En ella se describe las vicisitudes de un individuo incapaz de expresar sentimientos o de forjarse una moral acordes, que vive la escisión entre razón-sensación-emoción, y reacciona sin razón ni motivo aparente.

Vivir por inercia, esa sería la justa definición del protagonista de esta obra, de nuestro extranjero. Con ella Camus llevó a cabo una amplia inmersión en el mundo del existencialismo, así como su protagonista que convirtió en una auténtica encarnación del nihilismo.

Los personajes de Camus están siempre en lucha, consigo mismos, con la enfermedad, con la cultura, con el mismo Dios. Sin embargo eso no consigue quitarles ni un solo ápice de su humanidad, sino todo lo contrario.

A lo largo de su obra abandonó el existencialismo primigenio de Sartre. Camus fue uno de los más sobresalientes de una generación de escritores cuyas obras se centraron en la tragedia, por aquel entonces heroica.

Camus protagonista de los diferentes conflictos de la época, tomó una clara y diferenciada posición en relación con sucesos como los crímenes del régimen stalinista o la problemática en Argelia.

Dotado de una gran sensibilidad y una profunda admiración y amor hacia su País, Albert Camus se convirtió en el escritor francés por excelencia y en uno de los mayores representantes del existencialismo a nivel mundial. Sus novelas marcaron un antes y un después en la literatura y a día de hoy se consagran como un pilar fundamental para cualquier lector férreo.

 

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