Hablamos con Jose Antonio Mondragón y la Feria de Arte Emergente "Art and Breakfast 3"

Por Alberto Medina

Es indudable que Málaga se ha posicionado como uno de las ciudades referentes en el arte contemporáneo en Europa. Si pocos pensaban que un museo de arte contemporáneo atrajera a visitantes y malagueños, más utópico era pensar que obras de Kandisnky o Pollock arribaran a la Costa del Sol. Mucha culpa la tienen personas emprendadoras como Jose Antonio Mondragón, director de Factoría de Arte y Desarrollo, y una de las cabezas pensantes del Art & Breakfast. Hablamos con Jose Antonio de esta original feria de arte contemporáneo que se desarrollará del 9 al 11 de junio en el Hotel Larios de la capital malacitana.

Para aquellos que no lo conozcan ¿qué es Art & Breakfast que se celebrará en Málaga?

Es una Feria Internacional de Arte Emergente que, desde hace tres ediciones, se celebra en la ciudad. Está configurada como una serie de actividades de formación, y de eventos en torno al arte más nuevo que se sucede en distintos puntos de la ciudad y una muestra de unas 40 propuestas expositivas de galerías y artistas que se lleva a cabo en el hotel Room Mate Larios.

¿Por qué organizar una feria de arte en un hotel? ¿Qué desafíos y oportunidades surgen?

El Hotel es un entorno en el que la entrada de los visitantes no acostumbrados a ir a galerías o a Palacios de Ferias es más probable. Pretendemos acercar las últimas tendencias artísticas al público general, de manera que cruzar el umbral no implique tener conciencia de coleccionista o ser asiduo a exposiciones y eventos culturales necesariamente.

Exponer en un hotel implica un reto de importancia, puesto que la propuesta de los expositores debe contar con un espacio que les es ajeno, y que no está específicamente diseñado para ese fin. Se trata de ubicar las obras para que dialoguen con el mobiliario y la decoración del Hotel. Puedo aseguraros que los resultados son asombrosos y muy creativos, lo que al final también lo convierte en una ventaja para el visitante.

¿Qué actividades se desarrollarán en la presente edición?

Art & Breakfast nace para paliar el diferente desarrollo cultural de las instituciones y de los artistas y espacios expositivos. Por eso se constituye como un evento global en el que incluimos actividades formativas, talleres, encuentros profesionales, espacios de networking y muestras específicas de proyectos y de manifestaciones artísticas.

¿Y esta tercera edición tendrá algo que la diferencie a las anteriores?

Todas las ediciones son diferentes, puesto que, aunque contamos con muchos expositores que residen desde la primera edición, muchos de ellos son nuevos. Los artistas -tanto los representados como los que presentan sus trabajos de forma independiente- participan con obras diferentes -que se suelen presentar por primera vez en nuestra feria- y que sin duda, hacen de cada edición un evento diferente e irrepetible.

Además las actividades son siempre distintas, en un intento de renovar nuestra Feria de manera constante.

¿Qué tipo de público acude a Art & Breakfast?

El grueso de los visitantes a Art & Breakfast está mayoritariamente formado por personas jóvenes interesadas en el arte y la cultura, aunque no necesariamente. Esperamos más de 2.000 visitantes y participantes este año, de forma que podremos encontrar muy distintos perfiles.

¿Qué balance puedes hacer desde la primera edición de Art & Breakfast?

Creo que la Feria se está consolidando en la ciudad. Tanto las instituciones participantes, como los visitantes esperan el evento y lo reciben como algo que ya forma parte del panorama cultural de la Ciudad de los Museos. Cada edición supone un nuevo reto y el equipo se esfuerza en la búsqueda de lo novedoso, de lo distinto dentro del panorama artístico. El balance es muy positivo. Supone un trabajo que nos obliga a estar al 100% de nuestras capacidades, pero que poco a poco hemos ido inoculando entre los profesionales y los ciudadanos.

¿Cuántos expositores vienen al Art & Breakfast y de qué puntos de España? ¿Alguno internacional?

En torno a cuarenta. Tenemos dos propuestas internacionales en esta ocasión, lo que supone incrementar la presencia de fuera de nuestras fronteras respecto a ediciones anteriores. Contamos con Ufofabrik, una galería italiana que siempre nos ha acompañado y con Manolo Magazine, que a pesar de su nombre, se trata de un proyecto que tiene base en Brighton.

¿De qué instituciones públicas y privadas tenéis apoyo?

El Ayuntamiento de Málaga nos ha apoyado desde la primera edición. Su colaboración es indispensable, puesto que desde las áreas de Cultura y Juventud impulsan la presencia de la feria a través de la concesión de espacios a artistas o colectivos de la ciudad. Promálaga -entidad pública municipal destinada al apoyo de iniciativas empresariales- también colabora de forma muy significativa en Breakfast Meeting, el paquete de actividades formativas, de desarrollo y de networking que se presenta cada año como parte de Art & Breakfast. También tenemos alguna colaboración puntual de la Diputación de Málaga.

Después, y como eje de la Feria, contamos con la participación del Museo Picasso Málaga, el Museo Carmen Thyssen, el Ateneo de Málaga, el Museum Jorge Rando, el Centre Pompidou, la Colección del Museo Ruso de San Peterburgo y la Fundación Picasso- Museo Casa Natal.

¿Existen otras iniciativas parecidas?

Nuestra Feria no es la única que se desarrolla en un hotel. Aunque ha habido más hace tiempo, creo que son tres en este momento las que siguen ofreciendo ediciones en el país. Sin embargo sí es la única en implicar tantas instituciones públicas como parte del evento. Somos en realidad un evento complejo que se lleva a cabo en distintas sedes y ahí estriba el valor diferencial de nuestra propuesta.

¿Os han tentado para cambiar Málaga por otra ciudad?

Sí. Y no han sido pocos los que nos han lanzado la propuesta. Al menos otras tres ciudades andaluzas, y algunas del resto del país nos han propuesto un Art & Breakfast con distintas ubicaciones.

Factoría de Arte y Desarrollo es la promotora de Art and Breakfast ¿qué nos puedes contar sobre esta compañía? ¿Desarrollaréis otras actividades durante esta primavera-verano aparte de Art & Breakfast?

Nuestra entidad nunca descansa. En esa línea, siempre estamos preparando actividades. Nuestros cursos de experto en áreas relativas a las distintas profesiones culturales son ya una tradición. De algunos de ellos contamos con más de 10 ediciones. Siempre tenemos en activo seminarios de especialización para fin de semana. Nuestra escuela de verano celebra ahora la tercera edición, y desde el inicio ha tenido una excelente acogida por parte de sus participantes.

Este año nos estrenamos con nuestro primer campamento urbano para jóvenes artistas, que parece que va a funcionar genial. WE ARE FAIR! nuestra feria en Madrid, está calentando motores porque celebrará su segunda edición durante el mes de octubre. Por otro lado, nuestra galería no descansa más que dos semanas en agosto, lo que también nos genera mucha y muy reconfortante actividad.

Además continuamos con la gestión de servicios artísticos y culturales en museos e instituciones culturales y la promoción de actividades culturales para personas y grupos en situación de riesgo o exclusión social.

¿Qué tendencias existen en los últimos años en la exhibición del arte contemporáneo?

Creo que el arte que ahora se hace consigue liberarse del elemento estético en una mayor medida que antes. El discurso que subyace tiene cada vez más relevancia en ese balance, a pesar de que eso no implique que la estética no esté presente en la producción. Es, en general, un arte más libre, más democrático y más espontáneo.

¿Dónde se disfruta mejor del arte contemporáneo: en un museo o en una galería de arte?

El arte puede disfrutarse cuando es de calidad en cualquier espacio. La cuestión es que hay toda una franja de artistas y de trabajos que no tienen la oportunidad de mostrarse en una institución museística. Las galerías cumplen una misión muy importante para complementar el panorama artístico actual. En todo caso, y bajo mi punto de vista, ambas tipologías deben hacer un gran esfuerzo por hacerse accesibles a la población general, por acercarse y abrir sus puertas de par en par a todos y todas.

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