Transbordo. Poemas del metro de Barcelona, de Jorge Díaz

 

Por Ana M. Caballero

Transbordo. Poemas del metro de Barcelona (Ed.Garúa) es un trayecto entre el interior del poeta cordobés Jorge Díaz Martínez y el mundo que le envuelve, una capital catalana que le sacia de imágenes y vivencias.

El autor baja a los túneles de Barcelona para expresarse, pero rehúye de hablar del monstruo de hierro. El yo poético de Jorge Díaz es un yo del detalle, no de las muchedumbres. Se fija en el acordeonista de Urquinaona, en la musicalidad de las escaleras mecánicas o en como los pasos coinciden en las pisadas.

Abstrae situaciones y sentimientos a través de una poética minimalista, directa, expresionista, aunque, a veces, su economía del lenguaje resulta críptica. Se atreve con alteraciones formales vanguardistas dejando volar las palabras para reforzar el significado. El poeta siente gusto por la sonoridad de las palabras, más que por su utilidad, por lo que se decanta por los asíndetos y la contundencia que estos transmiten, además de las metáforas globales que nos muestran escenas de una Barcelona que todos reconocemos.

Los poemas de Díaz se detienen en las paradas de Diagonal, Verdaguer, Sants Estació, Drassanes, el Liceu… y, a través de escenas que despiertan estímulos, nos exponen la idiosincrasia de cada una de estos rincones subterráneos. Se trata de un recorrido por las líneas de metro que, en realidad, nos muestra un mapa de la ciudad, el que anduvo Jorge Díaz en su estancia en Barcelona y que tiene su parada final en Beiging, donde ahora reside, aunque quizás sea otro transbordo más.

El jueves, 8 de noviembre, Jorge Díaz Martínez presenta su nuevo libro Transbordo. Poemas del metro de Barcelona en la ciudad condal. El acto será en la Tasca Bohèmia (C/Bòria, 22) a las 20.30h, intervendrá el poeta y editor Sergio Gaspar.

 

Paral·lel (Jorge Díaz Martínez) 

Infantiles, igual

que a la hora del recreo,

africanos, asiáticos, latinos,

europeos a prisa

se nos ve,

vamos saliendo.

 

Compartimos desquites

y tickets, clamando, al fin

es viernes.

 

Se divierte el alcohol.

Tienen pis las esquinas.

 

Viejos adolescentes

y jóvenes expertos.

 

Por una vez, el metro

parece un carrusel.

 

Ha subido Dionisos

y Apolo es un teatro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *