Juan Gelman

poesia-reunidaJuan Gelman

Poesía reunida

 

Seix Barral. Barcelona, 2012

 

 Por Ricardo Martínez 

 

También conocemos, a través de la literatura, que el dolor (que es uno de los sentimientos dominantes en la vida del hombre, acaso implícito por naturaleza, en razón de su intrínseca soledad) le viene al escritor, unas veces por carácter, donde habría de considerarse una postura crítica ante la realidad, y otra, la peor, por razones impuestas, exteriores, cual es el caso de este poeta que ha sufrido en propia carne los desmanes violentos que en su día generó la dictadura argentina, y cuyas secuelas no se puede decir que se hayan extinguido del todo. 

        Y como quiera que el dolor es un argumento reticente, y a sabiendas que el poeta siente de un modo especial cada vez que se enfrenta al poema, he aquí que el texto que ahora nos presenta Seix Barral con la obra poética reunida de Juan Gelman, pronto advierte el lector que está transido de dolor. Un dolor no tanto visceral, sino expreso como reflexión, como generador de rechazo cuando no de repugnancia: “los sueños rotos por la realidad/ los compañeros rotos por la realidad/los sueños de los compañeros rotos/ ¿están verdaderamente rotos/ perdidos/ nada/ sobre la tierra? ¿su rota luz/ diseminada a pedacitos bajo tierra?” (Muchos poemas comienzan en minúscula, y esa forma creo que le otorga proximidad, verosimilitud).

Aún así, el poeta procura conjurar, de algún modo, el dolor, y lo viste con esa forma una tanto ingenua y, desde luego, poética: “¿alguna vez/ los pedacitos se van a juntar? ¿va a haber la fiesta de los pedacitos que se reúnen?

        Es una poesía muy implicadora por cuanto es inexcusable tomar postura de conciencia  ante lo que el poeta expresa. Es, a la par, una llamada culta, civilizadora, a favor de lo que ha de ser, humanamente, el rechazo de un mal impuesto al otro por la fuerza. Exige esfuerzo y valentía, pero el sacrificio no habrá sido en vano si se consigue algo de concordia como actitud, algo de sentido de armonía tal como, creo, debe desprenderse de este texto no solo sentido, sino pensado con esforzada mesura a favor del sentido de futuro acorde al ser del individuo, del sentido de la libertad.

        “Extraña es la poesía./ Un poema que empieza con/ las cláusulas del día sigue/ en lo que no se ve./ El aire pasa por/ flautas que tocan vino, ojos/ confiados pasean/ por trabajos nocturnos y/ la garganta en su lengua sube al/ espacio que nadie tocó” Pero el balance, al fin, no podría sino ser triste porque el poeta alude a la memoria. Dejo al lector que complete el poema con su lectura, que obtenga su sentimiento propio de este libro emocionante.

 

One thought on “Juan Gelman

  • el 30 marzo, 2013 a las 12:54 pm
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    Gelman fue un poeta genial, justamente por ser capaz de transmitir, tal como se dice en éste artículo, el dolor, su reacción ante el dolor, donde el poema pasa a ser bandera de resistencia y de revolución.
    Muy buen artículo, sin dudas un gran libro de Gelman.
    Saludos!
    Alberto

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