La Crisis, de Sergio C. Fanjul

 

crisis-sergio-fanjul_1_1701123La Crisis

Sergio C. Fanjul

 

Edita: Ya lo dijo Casimiro Parker, 2013

 

Por Alberto García-Teresa

 

 

¿Cómo no escribir poemas sobre las condiciones materiales que determinan nuestras vidas cuando ambas se encuentran al límite del colapso?

 

Esto es lo que lleva a cabo Sergio C. Fanjul en su segundo poemario, La Crisis, que marca una gran distancia con su predecesor, Otros demonios. A través de personajes simbólicos, representativos del estado económico actual, el escritor hace un repaso muy mordaz a la sociedad. El libro destaca por la corrosiva ironía y el sarcasmo que desprenden todos los textos. Esa acidez resulta la respuesta violenta a la agresividad del capitalismo. En los poemas, entonces, se presenta una oposición entre un tono de gran lirismo o un mundo dulcificado y una durísima realidad de miseria, desahucios, desempleo y suicidios. Se produce, en ese sentido, cierta ridiculización. De hecho, esa ironía también se aplica con los tópicos de los colectivos y métodos antagonistas. Incluso, con los arquetipos de la clase obrera.

 

Fanjul aborda situaciones extremas desde una perspectiva documental (externa), pero ofrece siempre un enfoque novedoso. Sus poemas no consisten sólo en testimonio, sino que trabaja desde él para lograr efectos adicionales, para emplearlo como recurso lírico al mismo tiempo que deja constancia de la realidad: «dentro de la hormigonera abandonada / duermen los sueños del cemento».

 

Por otra parte, en las piezas, Fanjul introduce referencias a nombres propios de un contexto comercial o capitalista (Lehman Brothers, Ibex-35, INEM, Fairy, Cuenta Naranja…). Con ellos, crea complicidad con el lector y, así, al buscar el guiño, se relaja el tono y se rompe el dramatismo. De hecho, despiertan cierta comicidad al producirse ese reconocimiento. Igualmente, sirven para establecer una identificación que no se busca con los acontecimientos representados: el lector puede no sentir cercanas algunas de la situaciones de la crisis recreadas, pero sí con los apuntes costumbristas que salpican los poemas.

 

La crisis como tal aparece nombrada explícitamente en distintas ocasiones. De hecho, se refleja que estos textos surgen como respuesta a la crisis, no tanto al capitalismo: «en tiempos de expansión el econopoema / es aburrido y lánguido y revolotea moribundo […] // pero en tiempos de Crisis el econopoema / revive reluciente y alza vuelo y toca el sol». Y, aunque en la contracubierta se alude a los culpables («este libro puede herir la sensibilidad de los culpables»), sin embargo, en los poemas sólo aparecen las consecuencias de la situación económica de hoy.

 

De este modo, se hace explícita una crítica de las condiciones laborales actuales; la precariedad, el empobrecimiento y la pérdida de derechos. Por otro lado, hace alusión al crecimiento económico e industrial en los términos actuales, que avanza expandiendo el consumo pero arrasando con él el medio ambiente.

 

Sergio-FanjulEn ese sentido, Fanjul muestra la vida arrasada por el consumo, los sueños determinados por la publicidad. Se trata, entonces, de un proceso de alienación total. Además, el autor incide en que no tenemos el control de nuestra vida, pues ésta es determinada por las condiciones laborales y económicas que deciden los consejos de administración de las empresas. También consta un discurso antimilitarista, un análisis de la estrategia del control a través del miedo. De la misma manera, arremete contra la reformulación del lenguaje con eufemismos, que esconden la hipocresía.

 

Los poemas suelen cerrarse con giros, finales sorpresivos o conclusiones contundentes. En el volumen, se halla una diversidad de metros y de extensiones, desde el poema en prosa articulado con anáforas, al registro narrativo o algunas piezas extremadamente breves. Especialmente en estas últimas, el autor apuesta por el juego de palabras y por el golpe de ingenio. A su vez, hay que reseñar que, formalmente, la única mayúscula que existe en el poemario es «Crisis».

 

En definitiva, la exposición irónica de la sociedad constituye el eje de todo el poemario; un libro que busca el texto chispeante, y que pone de manifiesto la notable evolución de la poesía de Sergio C. Fanjul.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *