El gran libro de la ecología

4174 Título: EL GRAN LIBRO DE LA ECOLOGÍA

Autora: MARY HOFFMAN

Ilustradora: ROS ASQUITH

EDITORIAL JUVENTUD

Por José R. Cortés Criado

 

A lo largo de las páginas de este álbum ilustrado, los autores ofrecen una serie de recomendaciones para salvar el planeta Tierra.

 

Cada doble página nos presenta un tema diferente, desde el primero titulado Nuestro hogar en el espacio hasta el último, Tu planeta te necesita, veremos y leeremos sobre el lugar maravilloso donde vivimos, el planeta azul, el planeta verde, el aire que respiramos, el cambio climático, todos los animales, la cuenta atrás, ahorra agua y energía, reduce, recicla, reutiliza, larga duración, repara, baja el ritmo, pregunta, inventa y otra vez azul.

Mary Hoffman

El público infantil recibe por medio de textos breves, eslóganes y dibujos la información necesaria para evitar el declive de nuestro planeta, aprender a reciclar y aprovechar los recursos existentes, dando pautas de comportamiento tendentes a mejorar nuestro comportamiento y dar de lado a los hábitos consumistas que están tan extendidos socialmente.

Las páginas dan información sobre animales en peligro de extinción, la necesidad de los árboles, el peligro de la contaminación, la influencia del cambio climático en determinadas especies, pequeños e importantes consejos para mejorar nuestra forma de vida como apagar la luz o los aparatos eléctricos cuando no se usan, abrigarnos para estar en casa en vez de encender los radiadores, reciclar para ahorrar energía, hacer compost…

Los textos van acompañados de ilustraciones sencillas y claras al respecto, cada doble página tiene unas cenefas diferentes según la temática que se aborda en ellas, así se pueden ver gusanos, hormigas, escarabajos aniquilas y pulgones en una de ellas; en otras todo tipo de aves, árboles o herramientas.

Al final se ofrece al lector un glosario de palabras útiles sobre la temática tratada.

Es un buen libro que marca pautas que pueden contribuir a cuidar la Tierra desde pequeño, si los habituamos a cerrar los grifos cuando no sea necesario que arrojen agua, a reutilizar objetos o a reciclarlos con la finalidad de formar personitas que piensen en verde.

Ros Asquith

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *