Un mundo feliz, de Huxley

Por Macoco G.M. autor de la novela de fantasía psicológica “La sombra de la existencia”. Si quieres conocer más sobre su novela, pulsa en el siguiente enlace: www.lasombradelaexistencia.com

88522_main_fullEl futuro será como queramos todos que sea, o como los poderes fácticos y los intereses de los más poderosos nos dejen, y la visión de Huxley estremece todos los pilares de la sociedad en la que nos encontramos.

Y es que en esta distopía ficticia desarrollada en un futuro post apocalíptico surgido de una confrontación global que hizo que se formara un Estado Mundial que erradicó las guerras y las hambrunas gracias a la tecnología, el escritor británico lleva a cabo un feroz ataque contra la moral y la ética establecida, y desde este punto de vista, es un libro que habla más del presente que del porvenir.

Porque poniendo el foco en una sociedad más avanzada y supuestamente feliz, Huxley destroza literalmente el concepto de familia o de relaciones sentimentales, haciéndonos ver en una escena que queda para la historia, cómo un grupo de niños, que están siendo educados fuera de cualquier núcleo familiar, se tocan y exploran su sexualidad sin ningún tipo de tapujos, o cómo está muy mal visto «enamorarse» y tener una pareja estable, siendo lo socialmente establecido la más absoluta promiscuidad.

En relación con el concepto de felicidad, aquí Huxley es cuando definitivamente hace tambalear todos nuestros cimientos, al segregar a los trabajadores en castas preparadas desde su nacimiento, es decir, la sociedad genera personas adaptadas a lo que luego van a hacer, con lo que nos encontramos con situaciones tan absurdas como que un enano de la casta más baja sea feliz dentro de una cueva extrayendo metales, ya que ha sido programado para tener fobia a la luz y a los espacios abiertos, con lo que si lo sacas de ese entorno de trabajo su vida se derrumbaría. ¿Es esa persona feliz? Desde su punto de vista totalmente, pero desde el punto de vista de nuestra estructura mental esto nos chirría bastante.

En definitiva una lectura imprescindible, que a lo largo de la vida de Bernard Marx, un hombre maduro de la clase social más elevada con una escandalosa vida sexual (por ser demasiado casto y llegar al punto de enamorarse), nos va narrando cómo dicho personaje va poco a poco repensando el modelo de vida propuesto por la sociedad y va descubriendo que dicho modelo no es para él. En este sentido, mi novela “La sombra de la existencia” bebe mucho de esa agresión hacia la individualidad de una supuesta felicidad colectiva.

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