Eduardo Nave, un recuerdo del instante

Por Claudia Banqueri.

El 11 de marzo de 2004, los españoles fuimos testigos del mayor ataque terrorista hasta la fecha en nuestro país. A tan solo cuatro días de las elecciones generales y con 192 víctimas y más de 2000 heridos, la sociedad se quedaba huérfana de toda inocencia. Trece años después, las heridas siguen abiertas.

El fotógrafo madrileño Eduardo Nave expuso en 2016 la obra “Once de Marzo”, en la que fotografió durante cuatro años cada 11-M, y a la misma hora de los hechos, los escenarios de la masacre que conmocionaron a todos los ciudadanos.

Se trata de un proyecto que tiene como objetivo mantener viva la memoria de aquellas personas que se vieron afectadas por los terribles acontecimientos que sumieron al país en un estado de caos e indignación que, en palabras del propio Eduardo, no deberían olvidarse nunca.

Hace un año expusiste en el Museo Nacional de Antropología la exposición “Once de Marzo”. Como sucede también con tu trabajo “A la hora, en el lugar”, ¿crees que los lugares preservan el drama del que han sido participes?

Baso mi trabajo en esa teoría, la memoria colectiva. Es imposible no acordarse un día 11 de marzo de lo que sucedió. De hecho, en mi proyecto “Once de Marzo” he realizado las fotografías durante cuatro años por eso. No es lo mismo hacer la foto un día 11 de marzo que un 5 de julio, por ejemplo. Al final, lo importante es el respeto por los heridos, familiares y fallecidos.

El terrorismo es un tema muy delicado y, por desgracia, con una gran presencia en nuestro país, se podría decir que el enfoque que le das es casi poético. Cuando se trata un proyecto con una temática tan dura, ¿es fácil atravesar la delgada línea que separa la documentación del morbo?

Lo fácil es el morbo. Lo difícil es no mostrar algo explícito. Mi intención es que el espectador piense más allá de una mirada instantánea. Es necesario mostrar la realidad, la sangre… pero para eso está el fotoperiodismo, para mostrar el hecho ocurrido. Sin embargo, en trabajos que se desarrollan poco a poco y donde el objetivo es hacer pensar al espectador, no es necesario mostrar algo tan evidente.

¿Por qué decidiste hacer un trabajo sobre el 11-M?

Comencé el proyecto en 2008 porque consideré que era necesario. El tema estaba muy politizado, sin embargo, los hechos se habían quedado difuminados. Decidí que quería hacer un proyecto ajeno a esa interpretación política que se le ha dado al 11-M, y cuyo principal motivo era no olvidar lo que sucedió.

¿Crees que hay falta de conciencia social?

Todo hecho trágico tiende a olvidarse. La repercusión de las acciones políticas obliga a los que lo hicieron mal a taparlo. El español olvida rápido. Me llamó la atención ver cómo gente que cogía el cercanías se extrañaba al verme haciendo fotografías. Parece que el pasado es algo en lo que no se tiene que excavar, pero el 11-M habría que recordarlo todos los días del año.

Las asociaciones de víctimas se han quejado más de una vez del olvido por parte de las instituciones políticas. Sin embargo, resulta curioso observar cómo en el mundo de la cultura el recuerdo del atentado está muy presente. Por ejemplo con esculturas, libros o canciones como la de “Ecos” que Luz Casal dedicó a las víctimas . ¿Crees que mediante el arte se puede mantener viva la conciencia histórica?

Es una de las obligaciones de la cultura. Yo siempre pongo de ejemplo las cuevas de Altamira, gracias a los dibujos tenemos información de cómo se vivía en la época. El arte tiene que ser reivindicativo, si no se convierte en un mero chiste. Lo que sucede es que a la política no le interesa el arte por esa capacidad que tiene de reflexión, no tenemos subvenciones, el problema del IVA… Por eso, yo intento hacer mis trabajos de forma libre e independiente, para evitar así manipulaciones.

¿Qué opinas de la cultura en España?

Aquí tenemos artistas igual de buenos o incluso mejores que en países como Francia, Inglaterra o Estados Unidos. El problema es que se ve como un divertimento, no como algo necesario. Tenemos la cuota de autónomos más alta de toda Europa porque el estado se piensa que no es necesario. Sucede como en la investigación, es algo en lo que no se invierte. Los políticos deberían darse cuenta de que el arte y la investigación necesitan tiempo y desarrollo, pero son esenciales.

 ¿Cuáles son tus próximos proyectos?

El 18 de mayo expongo un proyecto en el que llevo trabajando doce años que se llama “Like”. Trata sobre el paisaje, el viaje y el turismo, la forma en la que el ser humano ha manipulado el paisaje en pos de mejorar el viaje restándole así autenticidad.

El proyecto comienza con una génesis de un paisaje puro en la que se va introduciendo la mano del hombre y en donde se desarrolla también la influencia de las redes sociales y la forma de la comunicación. El ser humano viaja pero sólo para decir que ha estado en un lugar, se olvida de disfrutar de él.

Eduardo Nave fundó en 2005, junto con otros fotógrafos, el colectivo de fotografía contemporánea NOPHOTO.  Puedes ver más sobre su obra aquí: http://nophoto.org/

2 thoughts on “Eduardo Nave, un recuerdo del instante

  • el 20 abril, 2017 a las 10:36 am
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    Disculpa pero Eduardo es valenciano.

    Respuesta
  • el 25 abril, 2017 a las 10:48 pm
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    Gracias por la corrección, amigo. Estaba convencida de que era madrileño.
    ¡Un saludo!

    Respuesta

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