El teatro como antídoto contra la corrupción política

Por Óscar M. Prieto

En estos tiempos en que ni siquiera el contumaz nacionalismo sepulta los innumerables casos de corrupción que salpican la agitada actualidad, es muy oportuno acercarse al teatro Lagrada de Madrid para asistir a la representación El diputado y contemplar, de cerca y sin pared por medio, la transformación que experimenta el personaje protagonista a través del poder, al pasar de la tranquilidad de las aulas al torbellino de la política. La onda expansiva de la decisión es de tal magnitud que rompe en mil pedazos la convivencia familiar. La mujer del diputado, que advierte cómo su marido va dejando en el arcén de los días los valores morales y culturales que presidieron su vida en común, se ve obligada a abandonar el hogar familiar para no tener que renunciar a la ética en la que se asientan sus convicciones. La vorágine afecta igualmente, aunque con distinta intensidad, a los hijos del matrimonio. Y por si eso fuera poco, el autor reserva un papel decisivo a un prelado eclesiástico que, tras convencer al protagonista para que acepte ir en las listas del partido democristiano de Italia, se ve abocado a tener que auxiliar al diputado cuando éste le pide ayuda porque ya no puede con sus argumentos retener a su esposa en el domicilio conyugal.

Leonardo Sciascia (1921-1989), escritor, periodista, docente, político y autor de la obra, puso desde muy joven el dedo acusador en la llaga de la corrupción política y en la pesadilla de la violencia mafiosa, siendo considerado como la conciencia crítica de Italia.

ASSUNTA: ….No, no quiero decir que ser comunista sea mejor ni más justo que ser democristiano o liberal, pero el hecho es que, desde el momento en que mi marido se convirtió en diputado, aquí, en cada uno de nosotros se ha verificado una corrupción, una descomposición de las ideas, de los sentimientos… ¿Y sabe qué se me ocurre? Que nuestra historia, la historia de nuestra familia, podría ser como el símbolo de una corrupción más vasta, de una descomposición más amplia…

Es de agradecer que una sala pequeña y de tan larga como solvente trayectoria como Lagrada, ubicada en el off Broadway madrileño y sabiamente dirigida por Miguel Torres, ponga en escena una obra de las que hacen reflexionar sobre la imperante degradación política, suponiendo un aldabonazo en la conciencia popular. Si a ello se le añade que la función mantiene vivo el interés del espectador durante toda la representación y que la ejecución actoral inocula renovados deseos de volver al teatro, la recomendación es obligada. Que la disfruten.

L’HONOREVOLE (EL DIPUTADO)

Autor: Leonardo Sciascia

 Traductor: Helena María Castro y Óscar M. Prieto

 Intérpretes por orden de intervención: Miguel Torres, Alba Martínez, David Solera, Maite Zahonero, Eva Bacardit, JuanJo Fernández, Feliciano Casado, Jose Angullo, Pedro Ampudia, Javier Bobillo, Antonia Domínguez y Miguel Cambero

Dirección: Miguel Torres 

Ayudante de Dirección: Pedro Ampudia

Iluminación: Elías Torres

Escenografía: Gregorio Calatayud

Vestuario: Aída Munárriz

Fotografía y Diseño Gráfico: Ana Cobo

Compañía: Espacioscuro

Producción: Lagrada Producciones Teatrales SL   

 

Datos de interés:

Lugar: Teatro Lagrada, calle Ercilla, 20(mapa)

Teléfono de reserva: 91 292 64 77

Fechas: días 11, 12, 18, 19, 25 y 26 de noviembre y 2 y 3 de diciembre de 2017. Y 12, 19 y 26 de enero y 2 de febrero de 2018

Horario: 21.00 horas, excepto domingos 20.00 horas

Precio: desde 11 €

Metros: Embajadores L3 y Acacias L5

Cercanías: Embajadores

Bus: 34, 36, C1, C2, 119, 116, 117 y 27

Parking: calle Martín de Vargas, 27

One thought on “El teatro como antídoto contra la corrupción política

  • el 20 noviembre, 2017 a las 1:20 pm
    Permalink

    Qué bien escribe por un lado, y qué bien interpreta por otro, la gente del Órbigo!!!. Buen trabajo!.

    Respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *