Mrs. Dalloway de Virginia Wolf, con Blanca Portillo dirigida por Carme Portaceli

Por Ana Riera

Virginia Wolf escribió Mrs. Dalloway en 1925, hace más de 90 años. La novela, su cuarto trabajo, supuso toda una revolución en el mundo literario, por la originalidad de su estructura formal, por la fragmentación de situaciones y personajes, y por su introducción del tiempo y los monólogos interiores. De hecho, la revista Time la incluyó en su lista de 100 mejores novelas en lengua inglesa entre 1923 y 2005. Quizás por eso esperaba más, mucho más, de la versión que puede verse hasta el 5 de mayo en el Teatro Español. Más aún porque llegaba con muy buenas credenciales, ya que la dirección y la versión corren a cargo de Carme Portaceli, actual directora del Español, y el papel de la señora Dalloway lo interpreta Blanca Portillo, una de las grandes actrices de nuestra escena. Y sin embargo hay algo que no acaba de funcionar.

La obra narra un día en la vida de Clarissa Dalloway, desde que se levanta por la mañana y comienza a preparar una fiesta para su marido, hasta el momento en que tiene lugar la celebración de dicha fiesta, ya por la noche. Durante ese singular recorrido, seguimos a Clarissa en su viajar hacia atrás y hacia delante, pasando de sus recuerdos al momento actual y de vuelta a algún hecho de su pasado.

Por el camino, descubrimos cómo las decisiones que tomamos van determinando nuestro camino y alejándonos de otras opciones. Que por eso al volver la vista atrás, no podemos evitar preguntarnos: “¿Cómo habría sido mi vida si…?” y nos queda esa sensación de nostalgia por lo perdido. También las limitaciones con las que se enfrentaban las mujeres de su época, que debían limitarse a cuidar y agasajar a sus maridos e hijos, mostrándose siempre como seres maravillosos y abnegados cuya principal aspiración era hacer felices a los demás. Y que un suicidio puede ser una oportunidad para que los demás aprecien más la vida y aprendan a disfrutar de ella al máximo. Y que las relaciones homosexuales entre mujeres también existen aunque no se hable de ello. Cosas todas ellas con las que podemos identificarnos hoy. Ese es quizás uno de los mayores logros de esta obra. En palabras de la propia Carmen Portaceli: “Lo más grande de esta obra es que toca la profundidad del alma humana y hace un recorrido por la vida de cualquiera de nosotros”.

Pero en la versión que se nos presenta, ambientada en la época actual y no en el periodo de entreguerras, en la que la protagonista en lugar de mostrarse intimista se dirige al público desde la primera escena y hasta baja al patio de butacas, en la que se interpretan dos temas rockeros con guitarras eléctricas sin que venga demasiado a cuento, el resultado resulta excesivamente plano, poco convincente y emotivo.

Se salvan algunas escenas, como las que protagonizan Angélica (Gabriela Flores), la mujer que quiere morir para acabar con las voces que la torturan, y Max (Jimmy Castro), su marido, que lucha con toda el alma por protegerla de sí misma y salvarla. O la del médico que llega a casa de Clarissa con la noticia de que Angélica se ha suicidado, provocando la reflexión de Clarissa y de su hija.

 

 

MRS. DALLOWAY
De Virginia Woolf

Dramaturgia y versión Michael De Cock, Ana María Ricart y Carme Portaceli
Dirección Carme Portaceli

Reparto:
Jimmy Castro Max
Jordi Collet Doctor
Inma Cuevas Sally
Gabriela Flores Angélica
Anna Moliner Elisabeth
Zaira Montes Doris
Blanca Portillo Clarisa Dalloway
Manolo Solo Peter

Equipo artístico:

Escenografía Anna Alcubierre
Iluminación David Picazo
Vestuario Antonio Belart
Música original y espacio sonoro Jordi Collet
Coreografía Ferran Carvajal
Diseño de vídeo Miquel Àngel Raió
Diseño de Sonido Pablo de la Huerga
Ayudante de dirección Eva Redondo
Ayudante de escenografía Marta Guedan
Ayudante de vestuario Cristina Crespillo
Estudiante en prácticas de dirección UCM Laura Fernández
Realización de escenografía: Pascualín
Realización de vestuario: Petra Porter, Rafael Solís y Mila González
Una producción de Teatro Español

TEATRO ESPAÑOL. Sala Principal. Del 28 de marzo al 5 de mayo 2019.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *