La poesía del gesto

Joana Brabo, la poesía del gesto

 

Por Agustín Calvo Galán

 

No creo que Mies van der Rohe estuviera pensando ni por asomo en la poesía cuando acuñó su famoso lema “menos es más”; pero, como frase que define de forma inmejorable la excelencia de lo mínimo, en esta ocasión me atrevería a aplicársela a Joana Brabo: inclasificable y polifacética poeta barcelonesa que ha venido desarrollando una extraordinaria labor creativa en varios campos relacionados con las artes gráficas, la poesía, la micropoesía y las poesías escénicas.

 

Los comienzos de Joana Brabo en el ámbito literario se desarrollaron ejerciendo como poeta graffitera, pero después de una cuantiosa multa dejó los sprays por otras modalidades menos arriesgadas de la creación. En el 2006 inicia su proyecto poético EN3PALABRAS que conjuga la micropoesía con la poesía creada desde la colectividad, además de implicar la edición tanto en libro como en diferentes soportes y materiales: chapas, imanes, tiras adhesivas, en los que la poesía mínima, la poesía de 3 en 3, en 3 rimas, en 3 palabras, en 3 versos, va tomando forma y recreándose sobre elementos de la cotidianeidad y transformando lo prosaica (como el típico imán  para puertas de nevera) en elemento del juego poético. La vigencia de este proyecto viene dada no sólo por el trabajo incesante y creativo de Joana Brabo, sino también por la implicación, especialmente a través de las redes sociales (http://www.facebook.com/EN3PALABRAS), de cualquier persona que quiera participar y cumplir la norma de crear en 3 palabras. Las posibilidades lúdicas y participativas se hacen infinitas, y la toma de contacto entre personas forma parte también de la creatividad lingüística, pues evidencia que no hay nada más social que el lenguaje. De esta manera, y gracias a la red, Joana Brabo no sólo comparte espacio con otros poetas, sino que también descubre en cada uno de nosotros el poeta o micropoeta que llevamos dentro, dando a creatividades latentes la posibilidad de salir a la luz a través de una fórmula tan sencilla como la construcción lingüística llevada su mínima expresión. Este proyecto, en su vertiente de red social, ganó en el 2010 el concurso de literatura multimedia que organizó el portal bubok.es.

 

Pero la palabra, el poema, hace tiempo que sabemos que puede volar liberada del papel impreso y la escritura, puede también levantarse y crecer. Joana Brabo trabaja su idea de micropoesía también desde la poesía escénica, es decir que con muy pocas palabras y algo de interpretación (llevada a su mínima expresión también: el gesto), accede a algo mucho más ambicioso, que sobrepasa la poesía y conquista escenarios. De esta manera la poeta se pone de pie y dice un poema con sólo dos palabras, por ejemplo: “tú” y “yo”, con estas dos palabras, -adecuadamente interpretadas, repetidas, y unidas a la variación en la expresión de la voz y su tono, al gesto de las manos, etc.-, se pueden explicar miles de historias. Siempre llevando el lenguaje hablando a sus extremos, estirando al máximo de las palabras para conseguir una infinidad de significados, una narratividad que trabaja con las palabras como si fueren naranjas en manos de un malabarista. Joana Brabo suele aderezarlo todo con un sentido del humor imaginativo que dulcifica la impresión de extrañeza inicial y que es capaz de atraer al más escéptico hacia las nuevas formas de creación poética. Por otro lado, la reivindicación de las vanguardias creativas del siglo XX (dadaísmo, surrealismo, etc.) se engarza con total naturalidad a la actualidad poética gracias a creadoras contemporáneas como Joana Brabo.

 

Por tanto, la puesta en escena que Joana hace de su poesía está llena de gestualidades, de acción y de actuación, de narración al límite, de sonrisas cómplices, de malabarismos fonéticos y de lenguaje cotidiano llevado a la extrañeza y a la frontera de lo experimental; pero sobre todo de gran poesía, no de poesía minimizada, sino de poesía como forma de conocimiento gracias a elementos mínimos, a una expresividad que podríamos decir que supera el idioma y se hace universal. Desprenderse de lo accesorio es una necesidad que Joana Brabo cumple a la perfección; desprendernos de lo accesorio convierte a las relaciones entre los seres humanos en lenguaje esencial.

 

  

Joana Brabo (Barcelona 1975) de formación grafista e ilustradora, inicia su proyecto de poesía EN3PALABRAS (2006). Ha participado en numerosos festivales y encuentros alrededor de la poesía y la edición como el Festival La Popular de Roses, al Festival Internacional de Poesía de Barcelona, el Festival Silencio de Lisboa, el Ciclo de Arte Sonoro y experimental Vibrato, el Edita de Huelva, el Festival de Música Experimental LEM o el Yuxtaposiciones de Madrid entre otros. En el 2011 participó como rapsoda en el programa “L’hora del Lector” de canal33 de la televisión autonómica catalana, convirtiéndose uno de sus poemas en un fenómeno mediático que ha acercado las influencias dadá y surrealistas a los institutos de toda Catalunya.

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