Charles Ranhofer y la primera hamburguesa

Por Silvia Pato

@SilviaP3

Seguramente, cuando los hermanos John y Peter Delmonico abrieron en Nueva York, en pleno siglo XIX, el 437px-Charles-Ranhoferrestaurante Delmonico’s no se imaginaban que el jefe de cocina que contratarían, Charles Ranhofer (1836-1899), terminaría siendo toda una leyenda culinaria cuyo nombre se asociaría al cine, la literatura y las hamburguesas.

Ranhofer comenzó su carrera con 16 años como cocinero del conde de Alsacia; más tarde, del cónsul ruso durante su estancia en Nueva York; y después, en la corte de Napoleón III. Fue en 1862 cuando los hermanos Delmonico lo contrataron para encargarse de las cocinas de su restaurante.

Ranhofer trabajó en Delmonico’s Restaurant en dos etapas. La primera de ellas abarcó desde 1862 hasta 1876, mientras que la segunda comenzó en 1879 para finalizar en 1896. Ese intervalo de tres años en los que no trabajó en el elegante establecimiento se debe a que se embarcó en la aventura de ser el propietario del Hotel American, en su país natal, aunque después regresó.

796px-244_DELMONICO'S_FIFTH_AVENUE,_BROADWAY_AND_26TH_STREETFueron muchas las recetas que creó en aquellas cocinas el chef francés, pero entre ellas vale la pena recordar las «Patatas de Sara», en honor a Sarah Bernhardt; la «Ensalada a lo Dumas», por Alexandre Dumas; los «Huevos Benedict», por Legran Benedict; o Veal pie à la Dickens y Beet fritters à la Dickens, en honor a Charles Dickens, con motivo de su visita a Nueva York en 1867.

Por si todo ello fuera poco, a Ranhofer, que introdujo el aguacate  en Nueva York, también se le atribuye la creación de la primera hamburguesa, tal y como la conocemos. El menú del Delmonico’s Restaurant es el documento más antiguo donde se hace referencia a ella. La Hamburg steak costaba 10 centavos de la época, un plato nada barato, si tenemos en cuenta que era el doble de lo que valía un filete de ternera.

Durante treinta años, aquel chef se encargó de uno de los restaurantes más famosos de su tiempo, con un menú de9781614270881_p0_v1_s192x300 siete páginas, escrito en inglés y en francés, y una carta de 62 vinos.

Dos años antes de abandonar el restaurante, Ranhofer publicó The Epicurean (1894), un tratado culinario que incluye más de tres mil recetas, que sigue siendo un referente para todos los amantes de la cocina del mundo.

FUENTE: Cook’s info

Steak perfection

MÁS INFORMACIÓN: Delmonico’s

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