El Cerebro Musical

Por Aníbal Monasterio Astobiza (@anibalmastobiza).

La música es capaz de generar una de las experiencias más poderosas que el ser humano puede sentir. Aunque todavía no sabemos porqué el ser humano tiene tal fascinación hacia la creación y percepción musical.

Desde Darwin la música se ha concebido como una actividad no adaptativa que no incrementa el éxito reproductivo, ni permite la supervivencia – el esfuerzo o el tiempo empleado en escuchar o crear música tuvo un coste de oportunidad frente a la caza o la búsqueda de pareja en la lucha por la supervivencia en nuestros entornos ancestrales. Sin embargo, esta ha sido una visión simplificada.

La música sirve múltiples funciones. Por ejemplo, funciones sociales como la cohesión grupal-facilita el contacto humano-y como medio de comunicación vinculado fuertemente a la evolución del lenguaje hablado, la música dota de sentido a ciertas actividades. Pero también cumple funciones cognitivas estimulando la imaginación y creatividad.

Por otra parte, la música favorece estados psicológicos positivos de bienestar pudiéndose aplicar como un medio terapéutico con implicaciones beneficiosas para la salud.

Los científicos y filósofos desde Darwin se han preguntado si existen mecanismos psicológicos (neuronales) específicos para la percepción de la música o simplemente procesos que han evolucionado para otro tipo de cosas que posteriormente han sido cooptados vía exaptación para la percepción musical.

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El trabajo de varios investigadores en neurociencia del Instituto Tecnológico de Massachusetts, Departamento de Ciencias Cognitivas y del Cerebro, es un paso adelante hacia una mayor y mejor comprensión del fenómeno de la música.

Sam Norman-Haignere, Nancy Kanwisher y Josh McDermott, autores de un artículo de investigación publicado en la edición online de la revista Neuron, han identificado mediante el uso de técnicas de IRMf (imagen por resonancia magnética funcional) poblaciones neuronales que responden selectivamente a la música.

Por primera vez, estos neurocientíficos han identificado una población neuronal en la corteza auditiva del cerebro que responde selectivamente a estímulos que las personas consideramos como musicales.

Para conseguir identificar estas poblaciones neuronales los autores escanearon el cerebro mediante técnicas de IRMf de 10 participantes mientras oían diferentes sonidos (música, habla, y sonidos naturales y artificiales como canto de pájaros o el arranque de un motor) empleando diversos métodos de análisis estadístico que discriminaban mejor la resolución de la señal medida por el escáner.

Una población de estas neuronas respondía mayoritariamente a la música, otra al habla y otras a ciertos atributos como la frecuencia o el tono de los sonidos.

Todavía no se sabe si es posible encontrar otras poblaciones neuronales que respondan específicamente al componente afectivo y emocional de la música, pero de lo que hay evidencias claras es que hay una jerarquía de procesamiento de la información.

Aunque este trabajo haya demostrado por primera vez que hay una respuesta selectiva por parte de poblaciones neuronales a la música, esto no quiere decir que haya un sistema cerebral innato dedicado a la percepción musical. Los autores consideran que futuras investigaciones nos dirán cómo la experiencia afecta a la percepción musical y cómo madura la percepción musical durante el desarrollo en la niñez.

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