Horacio Otheguy Riveira.
Anda a tientas por el extraño paisaje de maniquíes, luces de neón, botellas vacías que recoge y procura hacerse un hueco… y dormir en paz, pero la asaltan seres humanos -luego veremos quiénes son- que se mueven como robots, eternos maniquíes creados por ella, la ya célebre diseñadora de alta costura, Petra Von Kant, un ser encantador, sensual, generoso con un afán inconfeso de posesión que consigue lo contrario de lo que necesita: el pasaje terrorífico del amor idealizado al abandono o la separación provocada sin saberlo.
En definitiva, un reflejo de la propia experiencia del autor de esta historia, el Fassbinder de 26 años que escribió, estrenó (1971) y luego él mismo llevó al cine (1972): historia tenebrosa de amores intensos maquillados de trabajo permanente, forjados de creaciones al tiempo de zambullirse en la negación de una soledad desesperante, a ratos también idealizada a base de alcohol y sedantes, cóctel que acabó con su vida a los 37 años.
Conmovedora creación
Ana Torrent se implica de tal modo que recorre el cuerpo auténtico -y el revestido de ornamentos diversos-: todos los cuerpos son suyos, también todas las voces, internas y externas, con banda sonora a su vez muy intensa. Compone una Petra conmovedora en un marco escénico de distanciamiento y melodrama contenido.
El texto tiene sus componentes melodramáticos convencionales en el audaz entorno (para aquella época) de la atracción sexual de una mujer de 50 por una joven marginal…, pero la restauración de la directora permite superar sus límites temporales y aportar estilos que son miradas de rara estética expresionista.
Actriz y personaje se encuentran, se conocen, se admiran, detestan la compasión, y resolverán Las amargas lágrimas con renovada fuerza creativa. Cara y cruz de una existencia que Rakel Camacho restaura maravillosamente, adjetivo que me parece perfecto porque el ámbito en que se desarrolla la acción navega en un imaginario permanente, el mismo que Petra pone en práctica para esclavizar «dulcemente» a su asistenta-para-todo, «que hace todo lo que le pido», sujetar a sus amores hasta que rompen ataduras, todos mantenidos con holgura, como su propia madre y única hija: «Estoy feliz de que estudia en la mejor universidad, y vive en el mejor campus»…
Dinero, sexo, amor que se escurre como agua entre los dedos mientras, alguien canta en escena Lili Marleen… aquella bellísima canción de 1937, de amor y muerte, añoranza de un soldado en el campo de batalla, a la que el propio Fassbinder dedicara una película en 1981.
Tensión, autosuficiencia y desesperación: un trabajo admirable de Ana Torrent. [© Antonio Castro]
Beben en cabeza de maniquíes: Petra feliz con su insólita conquista femenina, y la bella muchacha piensa en un futuro sin ella… [Torrent y Aura Garrido en un caballito de tiovivo]. Foto: © Antonio Castro.
Aura Garrido en la primera fase de deslumbramiento, poco después de entregar su cuerpo desnudo en un ritual de elegante transformación. Un trabajo de minuciosa elaboración. [© Antonio Castro]
Julia Monje -en una lograda creación de teatro gestual- y la madre de Petra -irrupción sainetesca a cargo de la brillante veteranía de María Luisa San José-. [©Antonio Castro]
«Yo creo que es necesario tener humildad para poder soportar mejor todo lo que nos pasa. Todas esas cosas que son más fuertes que yo» Extracto de Las amargas lágrimas de Petra von Kant
Rainer Werner Fassbinder. Pasión enfermiza por el trabajo: “Ya dormiré cuando esté muerto”. Una compleja vida sentimental, bisexual activo, alcohol, drogas, tranquilizantes, somníferos con una desbordante capacidad creativa, fascinante seductor, eternamente feliz al crear y, a la vez, atormentado buscador de quimeras.
De izquierda a derecha: María Luisa San José, Aura Garrido, Ana Torrent, Maribel Vitar, Julia Monje. [Foto de la producción]
Reparto
Ana Torrent
Aura Garrido
Maribel Vitar
Julia Monje
María Luisa San José
Autor: Rainer Werner Fassbinder
Dirección: Rakel Camacho
Diseño de escenografía: Luis Crespo
Diseño de vestuario: Pier Paolo Álvaro y Roger Portal
Movimiento escénico: Rakel Camacho y Julia Monje
Diseño de iluminación: Mariano Polo
Espacio sonoro: Pablo Peña y Darío del Moral
Caracterización: Ruth Alcalá
Diseño de cartel y fotografía: Javier Naval
Ayudante de dirección: Ana Barceló
Técnico de iluminación: Edgar Calot
Técnico de sonido: Sergio Sánchez Bou
Una Producción de Pentación Espectáculos y Nave 10 Matadero
