Revenge (2017), de Coralie Fargeat – Crítica

 
Por Jaime Fa de Lucas.
Cuando una película es mala, las críticas perfectamente se podrían convertir en una especie de venganza por el tiempo malgastado. Es el caso de Revenge, donde un hombre casado y con hijos hace una escapada con su amante a una casa en medio del desierto. Todo normal –con su dosis de explotación sexual– hasta que dos amigos del hombre llegan a la casa y uno de ellos decide violar a la amante cuando él no está, mientras el tercero ni se inmuta.
Inverosímil, sí. Forzado, también. Pero lo peor de todo es que cuando el amante llega a casa intenta justificar el comportamiento de sus amigos diciéndole a la chica “la cagaron, pero eres tan hermosa que es difícil resistirse”. La ausencia de dimensión intelectual, emocional y psicológica en los personajes masculinos da vergüenza ajena, especialmente porque sirve de excusa para lanzar un ejercicio feminista infantil y sin ninguna profundidad que sensacionaliza un tema que es bastante serio.
Después de que la amante amenace con contárselo todo a su mujer, Coralie Fargeat se limita a presentar un juego del gato y el ratón en el que las inverosimilitudes se estorban unas a otras mientras la sangre va salpicando la pantalla de forma gratuita. Y ¡oh sorpresa!, la mujer, a través de su coraje, destreza e inigualable inteligencia acaba imponiéndose a unos hombres completamente estúpidos e insensibles. Nada más que decir señoría.
La interesante fotografía de Robrecht Heyvaert, lo único salvable de Revenge, no tiene la culpa de que la película sea tan superficial y banal. Las actuaciones son como máximo aceptables, aunque hay bastantes problemas en términos de caracterización y puesta en escena. El guion, lamentable en todos los aspectos, ni siquiera dedica algo de tiempo a desarrollar la personalidad de la protagonista para que ésta se eleve ligeramente por encima de los villanos masculinos. Incluso comete un grave error, pues al principio Fargeat objetifica al personaje femenino sin ningún reparo, pero más adelante no rompe esa percepción ampliando su personalidad o haciendo que cobre vida en otra dirección.
Observaciones:
– Fargeat explota en exceso la sexualidad y el gore y hay momentos en los que parece una película de serie b.
– Ejercicios de este tipo no aportan nada a la causa feminista ni al problema de los malos tratos, más bien dejan entrever que la violencia y el odio recíprocos son respuestas aceptables y gratificantes.
 

One thought on “Revenge (2017), de Coralie Fargeat – Crítica

  • el 11 noviembre, 2018 a las 9:19 pm
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    Vaya¡ Hasta que leo una crítica de esta película que coincide con mi parecer. Todo son elogios y altas notas, aplausos y vítores, odas y ditirambos. Y yo decía, “¿de verdad?,¿Será?”, y pues la vi. La película es ciertamente mala, y se percibe a los pocos minutos de su visionado. Es de una superficialidad increíble (en todo sentido argumental), los personajes pobremente dibujados (y creo acertado tu comentario de la objetificación del personaje femenino) y, como dices, inverosímil a más no poder. Casi mágica, roza los terrenos de la fantasía. Ah, y predecible desde el momento en que la chica sobrevive. Sabes que, de alguna forma u otra, en el metraje restante (hora y media), se cargará a los tres. Wow. Película recomendada únicamente a los espectadores ligeros que nos les importe ver borbotones de sangre cual brotaran de géiseres. Muy, muy simplona. Decepcionante.
    Gran texto el tuyo.

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