La vida de Dave Grohl o cómo sobrevivir a Nirvana

Por Alicia Valeria Alonso.
Corría el año 1994. Después del gran éxito de Nevermind, Nirvana se encontraba en el auge de su carrera. El nuevo sonido grunge había convencido a medio mundo y aquellos cuatro jóvenes de Seattle se habían convertido en los ídolos de toda una generación.  Pero Kurt Cobain no pudo con la presión. Su vida siempre estuvo marcada por la enfermedad y la depresión, y aquella nueva situación le vino grande. La profunda destrucción emocional a la que se veía sometido, y los excesos con las drogas acabaron con él un viernes de abril de ese mismo año.

Comenzó entonces el mito. Con sólo 27 años, el joven Cobain se convirtió en un personaje para la historia. Sus canciones ya denotaban una intensa carga nihilista, un profundo escepticismo…Como si la vida fuera una pesada carga que se veía obligado a soportar. No fue entonces extraña su muerte. Fue, más bien, un síntoma de coherencia. El suicidio, la sobredosis, o el asesinato como víctima de una conspiración orquestada por su esposa, Courtney Love, son aún  sombras que deambulan alrededor de aquel extraño incidente.

Muchos creían que ahí acabó todo. Kurt, el alma de Nirvana, murió. Y con él murió todo. Pero no sería el único que iba a dar que hablar. En la sombra acechaba el bueno de Grohl. Dave entró en la banda en 1990, justo a tiempo  para el éxito de Nervermind, y formó parte de ella como  segunda voz, batería y bajo hasta su desaparición. In Utero y un MTV Unplugged fueron grabados en aquellos tiempos de gloria. Grohl adoraba el estilo de Nirvana y acataba las directrices de su líder con evidentes muestras de admiración. Sin embargo, su inquietud iba más allá. Durante esa etapa compuso sus propias canciones, pero nunca animó al grupo a que las interpretara, ya que no las consideraba en la línea de lo que estaban haciendo por entonces. Kurt sabía de aquellos temas, pero la posibilidad de que Nirvana los tocara siempre quedó en el aire. Años después, Grohl se lamentaría al saber que Kurt estuvo interesado en tocar algunas de sus melodías, aunque modificando las letras. Le hubiera encantado que aquello saliera adelante.

La cuestión es que cuando Nirvana desaparece, Dave se niega a quedarse sentado, añorando lo que un día tuvo.  Compone y graba sus propios temas él solito, en un disco que llama Foo Figthters, haciendo referencia a los OVNIs que avistaban los pilotos aliados durante la II Guerra Mundial. Un tema, el de los fenómenos paranormales, que siempre le fascinó. Tras recibir muy buenas críticas de su maqueta, recluta a otros músicos para convertir el proyecto en una banda con entidad propia.

El segundo álbum de la banda, The Color and The Shape (1007), se convierte, según la crítica, en “uno de los mejores discos de rock de los 90”. Canciones como Monkey Wrench, My Hero, Johnny Park, o Everlong -uno de los temas más sobresalientes de su discografía- alcanzan un éxito indiscutible en el panorama musical del momento. Después vendrían There is nothing Left to Lose (1999), One by One (2002), In Your Honor (2005), Skin and Bones (2006), Echoes, Silence, Patience & Grace (2007) y un Grandes Éxitos en 2009, que muchos presagiaron como el fin de la banda.

Este periodo supuso para Dave Ghrol la década dorada de Foo Fighters, el grupo que él había creado de la nada, tras el funesto final de Nirvana. Y muchos se preguntaron cuáles fueron las razones de su éxito. Al margen de la evidente calidad de su sonido, Foo Fighters representa una nueva actitud hacia la música que atrapa a quien la escucha. Para Grohl, a diferencia que para Cobain, la música no es el paliativo que te permite sobrellevar  la profunda carga existencial que llevas dentro. Cobain despreciaba el mundo y todo lo que a él pertenecía. Detestaba el borreguismo, la doblegación, el conformismo…Y todo lo que estaba generando alrededor de su música se acercaba peligrosamente a aquello contra lo que él se revelaba: el sistema, las masas.

Para Grohl, en cambio, la música nunca fue un analgésico, sino una fiesta. Su actitud es optimista, creativa. Deja emerger toda su rabia a través de  la batería o del micrófono, donde parece desgajarse las cuerdas vocales en cada canción. Pero es una rabia en positivo. Es un espectáculo. Eso ha conquistado a su público. Y así ha conseguido mayores perspectivas de las que jamás hubiera imaginado. Una de ellas es tocar junto al bajista de su grupo preferido de la infancia, Led Zeppelin . Con él,  John Paul Jones, y con el  guitarrista de The Queens of the Stone Age, Josh  Homme, creó un “super grupo”, Them Crooked Vultures, en Los Ángeles en el año 2009.

Y es que las colaboraciones de Grohl con grupos y figuras míticas de la historia de la música reciente son extensísimas. Paul McCartney, Nine Inch Nails, Jimmy Page, Garbage, Killing Joke, Prodigy, Slash -Guns N’Roses y Velvet Revolver- o Tenacius D -el grupo de su gran amigo, Jack Black-, y hasta Queen han compartido escenario con él.

Su música siempre ha girado en torno al hard rock, con influencias de sus grupos referentes, como los ya mencionados Led Zeppelin y Queen.  Los sonidos más punk, hardcore y rock metal, que recuerdan a sus primeros pasos en la música en grupos como Scream -en Washington en los 80-,  y el heavy metal, que siempre han configurado cierta influencia en su bagaje artístico, están presentes en toda su obra. Sin embargo, suele alternar trabajos más rockeros con otros más melódicos. Así lo demuestra de forma evidente en el quinto trabajo de Foo Fighters, In Your Honor, un doble álbum que contiene una grabación de temas más potentes, cercanos al heavy metal;  y otra grabación acústica,  cercana al rock alternativo.

En cuanto a las letras, Dave habla de todo. Explora sus sentimientos y sus experiencias más cercanas. Rara vez se vincula hacia una u otra tendencia política. Sólo lo hizo en una ocasión, cuando apoyó al candidato demócrata a la Casa Blanca, John Kerry, en las elecciones presidenciales de EEUU en 2004. Posteriormente George W. Bush utilizó algunos de sus temas para su campaña política y reconoció públicamente ser fiel seguidor de Foo Fighters. A Grohl no le hizo mucha gracia…Y de ahí salió In Your Honor. También ha abordado la turbia relación entre Courtney Love y el difunto Cobain. O eso es lo que dicen del tema Let it Die. Lo cierto es que la muerte de su amigo le dejó una profunda huella, y la canción desenmascara su rabia contra todos aquellos que precipitaron su muerte, y quienes aún hoy  no le dejan descansar en paz.

Actualmente Foo Fighters es una de las bandas referentes  del rock contemporáneo, y quienes pensaban que la aventura había finalizado se equivocaban. Dave Ghrol vuelve en 2011 pisando fuerte. El segundo disco de Them Crooked Vultures y el octavo album de Foo Fighters se están cocinando. Y están casi a puntito. El pasado 6 de enero, los componentes de Foo Fighters anunciaron en su twitter que el trabajo estaba terminado. Consta de 11 canciones muy rockeras, ni una sola balada, y aunque no confirman el nombre, muchos creen que se llamará Back to Forth. En él colabora con el exbajista de Nirvana, Krist Novoselic, y todo apunta a que tendrá un sabor muy similar a Nevermind. ¿Será que Nirvana no ha muerto?

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