La máquina de Efrén

Por Eduardo Castro.

La máquina de Efrén cuenta la historia de un viaje, un largo viaje en el que sus tres protagonistas, Cristina, Miguel Ángel y Laia pronto se convertirán en cuatro. Para que eso ocurra, todas las piezas han de encajar… y lo harán.

La pequeña Selamawit es etíope, se encuentra en una casa de adopción de Addis Abeba, a la espera de que Cristina y Miguel Ángel, tras completar los procesos burocráticos tanto en España como en Etiopía, se trasladen para recogerla.

Éste es brevemente el argumento de una historia pero La máquina de Efrén es algo más, en ella se suman numerosas emociones, sentimientos, y se pone de manifiesto una forma de afrontar la vida nacida de la fortaleza del amor y el optimismo. Logra emocionar al lector, haciéndolo partícipe de la aventura.

La particularidad añadida, a lo ya contado, es que el título que nos ocupa es el segundo volumen de la obra Una posibilidad entre mil -finalista del Premio Nacional de Cómic 2010 del Ministerio de Cultura y Accésit en Francia en el 1er Trophée “Les Bds qui font la différence”, de la que ya se han publicado tres ediciones (la última prologada por Eduard Punset)-  y que es una obra autobiográfica.

Cristina Durán y Miguel A. Giner Bou son dos dibujantes valencianos que decidieron contar la historia de su primera hija, Laia, en Una posibilidad entre mil y la historia de la adopción de su segunda hija, Selamawit en La máquina de Efrén.

En Una posibilidad entre mil, los autores son padres por primera vez. Su pequeña, Laia, está en peligro. Hospitales, médicos y rehabilitación pasan a formar parte del día a día de esta familia. Hay una posibilidad entre mil de que Laia salga adelante. Su fuerza y alegría arrastran a todos por el camino de la vida.

Este segundo volumen, La máquina de Efrén, cuenta con numerosos detalles emotivos, muy íntimos, reflejados perfectamente en las ilustraciones de Cristina Durán y en el guión de Miguel A. Giner. Estos detalles podemos verlos a lo largo de todas las páginas de la obra. Una mirada, un comentario, un silencio cómplice…

Técnicamente llama la atención el trazo negro, suelto, vistoso, particular, así como el cromatismo de la ilustración (desarrollado por Miguel A. Giner) donde nos movemos de un rotundo verde hospitalario -que nos recuerda a la primera historia- a los tonos ocres (particulares de este volumen) que nos recuerdan las tierras de África. Destacar la transición cromática, llena de pequeños detalles, de la página 110.

En resumen, 163 páginas que valen la pena ser descubiertas y disfrutadas. Espero que lo hagan tanto como lo he hecho yo.

 

Más

  • Las primeras páginas de La máquina de Efrén se pueden ver aquí.
  • Más información sobre la obra gráfica en la web.
  • Y sus primeras páginas
  • A los autores puedes encontrarlos en su estudio, donde elaboran sus ilustraciones y comics.
  • La editorial que lo publica: Sins Entido.

 

 

 

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