Azkena Rock Festival 2016 (capítulo 2)

Por: Javier D. Taylor

Y para comenzar esta segunda entrega dedicada al Azkena Rock Festival 2016, citar a otra de las bandas con tirón, del 17 de junio: los escoceses Primal Scream, que se sumaron al cartel del festival coincidiendo con la publicación de su nuevo disco. Formados en Glasgow hace más de tres décadas, este grupo de rock alternativo ha mantenido como líder a Bobby Gillespie, batería de Jesus and Mary Chain durante tres años (hasta la publicación de Some Candy Talking). Después de su paso por la agrupación de los hermanos Reid, Gillespie dejó la banda para concentrarse en Primal Scream, y se convirtió en uno de los frontman más carismáticos del rock, sabiendo combinar sus principales influencias, como Led Zeppelin o The Rolling Stones, con la psicodelia, el garage rock, o incluso el trip-hop y el dance-rock.

Actualmente el grupo está formado por dos de los socios fundadores (Bobby Gillespie a la voz, y Andrew Innes a la guitarra). La banda se completa con Barrie Cadogan (guitarra), Martin Duffy (teclados), Simone Butler (bajo) y Darrin Mooney (batería). Otro guitarrista durante las giras es el productor Kevin Shields que fue miembro del grupo My Bloody Valentine.

Del country al delta blues del Mississippi

Como siempre, en esto de los festivales rock, cada quisque tiene sus preferencias, sus favoritos, e incluso sus ídolos con un poco de suerte, pero algunos van buscando “el estilo musical”, el SONIDO… Y esta última premisa se cumplirá en la edición de 2016 para muchos acólitos, para muchos de los peregrinos que se acercarán hasta la “explanada-multiusos” de Mendizabala, porque Lucinda Williams (ya citada ampliamente en el Capítulo 1), Blackberry Smoke, Vintage Trouble, Daniel Romano, Buffalo Killers, Luke Winslow-King, y Jared James Nichols, imprimen al cartel un SABOR, una personalidad que, en muy pocos festivales españoles, se va a poner disfrutar durante 2016. Porque quizás sin pretenderlo, los organizadores del Azkena Rock Festival han conformado un elenco con siete de los nombres más atractivos del panorama musical actual, cuyas melodías oscilan desde el delta blues al rock sureño, de la americana music al country-rock y aledaños.

Lucinda Williams /Fuente: lucindawilliams.com
Lucinda Williams /Fuente: lucindawilliams.com

Blackberry Smoke es una banda que cultiva el country rock, y vienen desde Atlanta, Georgia. La formación consta de Charlie Starr (voz principal, guitarra), Richard Turner (bajo, voz), Brit Turner (batería), Paul Jackson (guitarra, voz), y Brandon Still (teclados). Han actuado por todos los Estados Unidos tanto como cabeza de cartel, o de teloneros para artistas del calibre de Zac Brown Band (una de las bandas de moda en los USA, con más de 20 conciertos como supporters), Eric Church , ZZ Top y Lynyrd Skynyrd (recordar que estos dos últimos combos ya pasaron con éxito por sendos Azkenas).

En cuanto a Vintage Trouble decir que es una banda de blues rock estadounidense. El sonido del grupo se podría describir como retro, debido a que es parecido al de bandas de blues rock de los años 50 y 60, y expelen claras influencias de Chuck Berry, The Rolling Stones o The Animals, quizá por la búsqueda obsesiva de un “tipo de sonido en particular”. Hace cinco años lanzaron su primer álbum de estudio, titulado The Bomb Shelter Sessions. Como curiosidad citar que la canción «Today is Pretty Great» es utilizada en el comercial del coche Honda Civic, en el que los miembros de la banda también aparecen varias veces. Por cierto, el cuarteto lo forman Ty Taylor (voz), Nalle Colt (guitarra y coros), Rick Barrio Dill (bajo y coros), y Richard Danielson (batería, percusión y coros).

¿Y qué decir de Daniel Romano…? Pues que quizás estemos ante uno de los últimos grandes contadores de historias, con el soporte de la música campera como tonada al fondo. Y aunque no ha nacido en los Apalaches ni en Austin (sino mucho más al norte en Ontario – Canadá -), lo mismo apuesta por las baladas que por el mismísimo honky-tonk, con esa pinta de cowboy elegante, y mirando de reojo a Hank Williams. Veremos en Gasteiz si esa aureola/fama de “gramparsonismo” que le precede, la hace valer en directo, o nos seguimos quedando con Jonny Kaplan and the Lazy Stars como nuestros favoritos (recuérdense sus tres gloriosas actuaciones en Vitoria).

De Buffalo Killers a Luke Winslow-King

La banda de Ohio James Gang (el mítico grupo del Eagle Joe Walsh), fue un combo de los ´70, que cultivaba el rock más americano y guitarrero, repleto de riffs, con barnices psicodélicos y en ocasiones estribillos pegadizos. Pues Buffalo Killers es el grupo ideal para quienes sientan nostalgia de ese periodo musical impagable: el que va de 1967 a 1975 (es decir desde el Festival Internacional de Música Pop de Monterrey (California), al disco One of These Nights de los Eagles, para situar de modo más concreto los oídos). Lo forman tres tipos jóvenes, son de Cincinatti, y su éxito se ha jalonado gracias a la sorpresa que les ha supuesto a dos superestrellas del rock:

Al cantante de los Black Crowes, Chris Robinson, (que quedó prendado de sus discos, e insistió en tenerlos como acompañantes de su gira de 2007).

Y a un famoso paisano de Ohio, Dan Auberbach de los Black Keys, que produjo su segundo disco Let it ride. Esto puso de manifiesto claramente, que llaman más la atención de los VIP del rock, antes que del gran público.

Y unos cuantos datos más. ¿De dónde procede ese regusto hippy-vintage del trío? Pues parece que del padre de los hermanos Gabbard, un tipo enrollao (a juzgar por las crónicas) que tocaba la guitarra, y que les contagió la “enfermedad musical” por la obra de Grateful Dead, Neil Young, Crosby, Stills & Nash y diversas bandas de psicodelia y country. Con todo ello, cuando se unieron al batería Joseph Sebaali, crearon una atmósfera basada en instrumentales blues-rock, con unas melodías casi siempre sorprendentes, que pueden recordar incluso a los Beatles.

En cuanto a Luke Winslow-King, no vamos ahora a enmendar al todopoderoso New York Times: “Mezcla sin esfuerzo delta blues, gospel, y jazz con letras sencillas y personales que hablan de su evolución artística y personal.” Ahí es nada. Pero no es la única publicación influyente que le alaba. American Songwriter subraya que estamos ante “…una de las bandas más profesionales, originales, y leales a sus principios que hay en el panorama actual.” En sus letras pueden encontrarse escenas pintorescas, o momentos puntuales, instantáneas que hablan de lucha, incomprensión o celebración, todas ellas describiendo y haciendo crecer al protagonista. Cuenta en su haber con varias giras por los Estados Unidos y otros países con su pareja artística Esther Rose (ahora también esposa), y una banda variable que les reunieron en los escenarios con músicos como Pokey Lafarge, Taj Mahal (de nuevo presente el 13 de julio en el inminente Festival de Jazz de Vitoria – Gasteiz 2016), Chris Thile o Jack White. Y por detrás los ecos, los SONIDOS otra vez… de Dr. John, del Professor Longhair, Louis Armstrong, Scott Joplin (el de la B.S.O. de El Golpe), o Muddy Waters.

De veterana a I+D

Y para rematar esta segunda entrega, unas breves pinceladas sobre una veterana, y una banda de Euskadi que no tiene absolutamente nada que ver con todo lo comentado sobre el Azkena 2016 hasta ahora.

En cuanto a la soberbia Imelda May recordar que comenzó su carrera con tan sólo 16 años actuando en clubs de burlesque de Dublín (quizás de ahí proceda ese look tan voluptuoso, así como su inconfundible tupé). Formó su propia banda en 2002, y lanzó el primer álbum justo al año siguiente. Su voz (“una de las mejores voces del rockabilly actual” según el criterio unánime de la crítica), ha sido comparada en ocasiones con la de grandes cantantes de jazz femeninas tales como Billy Holiday o Wanda Jackson. Además de compositora, Imelda Mary Clabby es multiinnstrumentista (toca el bodhrán, el bajo, la guitarra y la pandereta), y cuenta en escena con el respaldo de los excelentes músicos que componen su banda. Sólo para los que pudimos disfrutar su huracanada doble actuación en el Azkena Rock Festival de 2010 (tanto en la Virgen Blanca, como dentro del recinto de Mendizabala), no hará falta recordar su magnética presencia en escena.

Y para finalizar, citar a la banda de rock/metal de Euskadi Cobra, un grupo peculiar dónde los haya sobre todo debida a la temática de sus letras, influida por películas y series de acción, o en otras palabras, quizá representen el lado más cinematográfico de la música, intentando unir dos mundos históricamente relacionados entre sí, como son la música y el cine. No en vano la crítica especializada ya los clasificó dentro del novedoso apartado “thriller rock”, debido a esa evidente influencia. Su andadura comenzó hace ya una década, gracias a la perseverancia de David González (al bajo – también en Berri Txarrak y TT L.T. – ), junto al otro socio fundador Josu Luengo (guitarra – Evirus69). El cuarteto lo completaron poco después con la voz de Haritz Lete (Kokein), y las baquetas de Ekain Elorza (Dinero). Por último citar que sus influencias oscilan entre grupos clásicos como Black Sabbath o Deep Purple, y bandas más modernas como Clutch, Soundgarden, Metallica, Down o Mastodon (que por cierto actuaron en la edición del pasado 2015).

Fe de erratas: En el anterior capítulo, se indicó por error que la banda estadounidense de heavy metal Danzig había actuado ya en 2011 pero, aunque figuraban en el cartel oficial, se dieron de baja antes de comenzar siquiera el Festival de esa edición. (Continuará…)

One thought on “Azkena Rock Festival 2016 (capítulo 2)

  • el 20 junio, 2016 a las 1:12 pm
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    Te perdiste a The Milkyway Express…

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