«Ladies Football Club»: jubilosa celebración de una comunidad de mujeres

Por Horacio Otheguy Riveira

Una crónica histórica adaptada al teatro por un equipo de gran creatividad. El fantástico resultado que, de momento, ha agotado las entradas de todas las funciones en Madrid, cuenta con 11 actrices que cantan de maravilla e interpretan sus personajes —y los que se cruzan en su camino, sean hombres o mujeres diversas— con gran disciplina de combate, ya que resulta impresionante todo lo que hacen, dicen y cantan en el singular espacio escénico creado. Todo ha de funcionar, y lógicamente funciona, con muchísima precisión porque la invención de aquel acontecimiento mundial es recreado como un espléndido musical en el que reina la euforia de jóvenes mujeres, en su mayoría esposas y madres, que trabajan en una fábrica de armamento sustituyendo a sus maridos que fueron a la guerra. Tras la monótona tarea de cada día, de pronto una tarde, surge la absurda idea de convertirse en futbolistas y en lugar de manipular redondas bombas darle al balón con energía. Lo absurdo asciende con el imparable rigor de la unión que hace la fuerza; eso sí, poblada de mucha energía oculta a lo largo de vidas impuestas por una sociedad patriarcal.

Simpáticas, tímidas o audaces, lo que importa es la suma, y Peris-Mencheta ha decidido aparcar para sociólogos e historiadores los detalles más complejos, oscuros o conflictivos de la lucha denodada de este equipo, y dejarlas reinar durante dos horas y media en un espectáculo trepidante, ciertamente cargado de excesos tanto para el esfuerzo físico de las intérpretes como para la capacidad de concentración de algunos espectadores. En cualquier caso corona de gloria lo esencial: la fuerza irresistible de sumar voluntades en un grupo de mujeres, hasta entonces menospreciadas por la mayoría de los elementos masculinos que lo dirigen todo, más aún en los años convulsos de la Primera Guerra Mundial.

El día 6 de abril del año 1917 (un viernes) la radio del frente anunciaba nuevos muertos. Entre ellos, el príncipe Friedrich Karl, sobrino del Káiser Guillermo, y bronce en salto a caballo en la Olimpiada de 1912. El día 6 de abril del año 1917 (un viernes) Lenin preparaba la Revolución Rusa. El día 6 de abril del año 1917 (un viernes) Estados Unidos entraba en guerra. Pero, sobre todo, el día 6 de abril del año 1917 (un viernes), durante la pausa del almuerzo, once trabajadoras de la Doyle & Walker Municiones, once munitionettes de manos amarillas, empezaban a correr detrás de un balón.

«El fenómeno del fútbol femenino nace en Inglaterra durante los años de la Primera Guerra Mundial. Equipos que se convirtieron en legendarios, formados por las trabajadoras de las fábricas textiles o de municiones, y que en poco tiempo lograron un enorme afecto y atención del público, provocando la hostilidad por parte de las instituciones masculinas del fútbol.

Terminada la guerra muchos de estos equipos fueron obligados a disolverse por ley tras unos años de éxitos increíbles. Con el regreso de los hombres del frente,  las trabajadoras perdieron sus puestos en las fábricas y volvieron a casa. Esta es la historia de esas mujeres».

Sin embargo, si bien esto se anuncia en la voz de Peris-Mencheta al principio, el espectáculo no llega a ese dramático final, se la juega siempre en una serie de espectaculares partidos de fútbol resueltos escénicamente con mucha imaginación, tanta que el balón es muchas otras cosas, tal vez la vida misma de todas y cada una felizmente hermanadas con un propósito cuya travesía no conoce desmayos. Entretanto suceden muchas situaciones narradas al público, al que a veces se le pide una que otra opinión, también vividas y cantadas en escena, en un mosaico altamente emocional de una existencia que sabemos única, y que el reparto torna inolvidable.

Foto: Sergio Parra
La escenografía de Alessio Meloni nos traslada a un mundo imaginario donde todo es posible. Tras la apariencia del patio o barracón de una fábrica de armamento, hay ángulos, puentes, recovecos, ventanucos… todo «otro mundo» al servicio del talento enorme de estas auténticas «águilas». (Foto Alessio Meloni)
Un espacio funcional, cuya apariencia hostil, es transformada en un lugar espléndido con las voces tan coloridas del elenco (dirigidas por Ferrán González) y brillantemente iluminadas por David Picazo. (Foto: Alessio Meloni)
Foto Sergio Parra.
Las once fabulosas intérpretes y en el centro el director Sergio Peris-Mencheta.

ELENCO Por orden de alineación Noemi Arribas, Xenia Reguant / Silvia Abascal, Ana Rayo, María Pascual, Nur Levi, Alicia González, Carla  Hidalgo, Irene Maquieira, Andrea Guasch, Diana Palazón, Belén González

Autor Stefano Massini

Traductor Ignacio Rengel

Dirección Sergio Peris-Mencheta

Adaptación Sergio Peris-Mencheta con la colaboración de Daniel Val

Composición musical
Litus Ruiz

Dirección Musical
Joan Miquel Pérez

Dirección Vocal y Arreglos Vocales
Ferran González

Diseño de Escenografía 
Alessio Meloni (AAPEE)

Diseño de Iluminación 
David Picazo (AAI)

Diseño y Realización de Vestuario Elda Noriega (AAPEE)

Foto cartel Sergio Parra

Diseño de Sonido
Enrique Rincón y Álvaro de la Osa

Producción Sonora
Óscar Laviña

Atrezzista
Eva Ramón

Coreografía
Amaya Galeote

TEATROS DEL CANAL. REPOSICIÓN DEL 30 NOV AL 23 DICIEMBRE 2022

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