La antología de Boba Fett

Portada de Star Wars Boba Fett Antología

El mundo de Star Wars está viviendo una nueva primavera. Entre su particular universo creativo han emergido diversos personajes. Unos más carismáticos, otros menos interesantes. Boba Fett está, sin ninguna duda, entre los primeros. Su silencio, su presencia en la distancia, el carácter de observador pasivo, le ha otorgado un aura de misterio. A esto se le suma su impiedad y la armadura mandaloriana que porta. Un conjunto de elementos que convierten al cazarrecompensas en atractivo y enigmático, como el propio Darth Vader. De hecho, Darth Vader y Boba Fett tienen numerosos elementos en común. Esto hace que ambos resulten interesantes para los seguidores de la saga.

Hoy hablaremos de Boba Fett y de la antología que ha sido publicada en Planeta hace algún tiempo. En ella se reúnen una serie de historias y episodios que tienen en común la presencia, más o menos importante, del propio cazarrecompensas. La compilación es interesante y permite tener en un volumen diferentes relatos. Ahora bien, cuando uno opta por este tipo de opciones editoriales es conveniente que se sea consciente de la diversidad de calidades, profundidades narrativas y de opciones de enfrentarse a un personaje. Por lo tanto, es conveniente, para no ser decepcionado, que se tenga una menta abierta.

Star Wars. Boba Fett. Antología, que así se llama la obra, contiene trabajos centrados en Boba Fett y tres historias provenientes de la serie Star Wars. Todas ellas publicadas originalmente por la editorial Dark Horse Comics. No vamos a detallar todo el contenido de la antología. Nos queremos centrar en las historias con mayor peso e intensidad narrativas. Las demás historias, entretenidas y repletas de acción, os la dejaremos para que podáis disfrutar en casa. Sabiendo que eso es lo que vamos a encontrar.

La primera historia Enemigo del imperio, firmada por John Wagner, es realmente sugerente. En ella podremos encontrar estos entresijos mentales, las dudas por alcanzar los objetivos y las intenciones de los personajes principales (Darth Vader y Boba Fett). Esto hace que la obra tenga poso y no se limite a ser una obra de acción al uso. El dibujo de Ian Gibson y John Nadeau es anguloso y, en ocasiones, presenta cierto aire infantil y poco dinámico, lo que le resta (a mi juicio) potencia narrativa a la historia.

Otra historia breve que me ha llamado la atención es el número 28 de Imperio, titulado “Escombros”. La historia está firmada por Ron Marz (guión), Adriana Melo (tinta) y Michael Atiyeh (color). Este relato es silencioso, lo que obliga a que la narración visual tenga que ser más profunda y detallada. De ahí que Boba Fett luzca de manera sorprendente y llamativa. Entre sus páginas veremos parte del carácter y de la fortaleza del personaje, todo ello asentado en su enorme motivación por lograr sus objetivos. La dificultad de la historia, contrasta con el final sorprende y llamativo que nos dejará con la boca abierta.

En “Boba Fett: Fuerza desmedida” veremos uno de los elementos que más interesantes resultan del personaje. Su capacidad para mostrar la realidad a todos aquellos que se acercan a él. La historia, firmada por Thomas Andrews (guión) y Francisco Ruiz Velasco (dibujo y color) muestra a Fett como artefacto de las intenciones, algo obscenas, de los diferentes personajes del imperio. Sabemos que Fett es eso, una persona que cobra por hacer un trabajo con independencia del mismo. Pero también sabemos que es un personaje con sus propios intereses y objetivos. Unido a esto está su capacidad para conocer las intenciones y obsesiones del imperio. Esto le permite jugar sus cartas como pocos. Pues bien, todo esto lo tendremos aquí. En una de las historias con mayor interés narrativo por, como acabo de decir, este entrecruce de intencionalidades. Otra historia realmente potente está firmada por John Ostrander (guión), Cam Kennedy (dibujo) y Chris Blythe (color), y lleva por título “Boba Fett: agente de la muerte”. Aquí veremos estos aspectos que acabo de mencionar unido al carácter paradójico del personaje. Es decir, en ocasiones no parece estar claro si es un salvador o no. Actúa y ayuda, pero nunca terminamos de saber si realiza estas acciones ya que le interesa o por un bien mayor. En esta historia nos encontraremos con este aspecto.

Finalmente, quiero comentar brevemente las historias “Boba Fett: Motores gemelos de destrucción” y “Boba Fett: Muerte, mentiras y traición”. Sin llegar a ser impresionantes, utilizan la concepción clásica de ese personaje interesado, analítico y perverso. En este sentido, Fett es un personaje que permite unos finales chocantes que hacen que queramos seguir leyendo más historias para ver qué nos encontramos. Finales que no son moralizantes, aunque también veremos alguno así, pero que nos harán dudar de las impresiones que hemos podido generar durante la lectura de la historia.

En definitiva, estamos ante una compilación realmente interesante que llama la atención por su diversidad de focos y planos narrativos. Aunque toda la obra está centrada en Boba Fett, nos iremos topando con diversos aspectos del personaje, esto hace que el propio personaje gane en capacidad de interpretación y que el lector se divierta viendo todos estos matices.

 

Por Juan R. Coca

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