Durante el transcurso de los últimos años, varias políticas de empresa han experimentado un importante auge a nivel nacional. Hoy hablaremos de una de las que más extendidas están entre los negocios de toda España: Retribución flexible en empresas, un programa pensado para incentivar a los empleados.
En este artículo, averiguaremos exactamente en qué consiste. Más adelante, profundizaremos en los beneficios que proporciona no solo a las propias empresas, sino también a sus trabajadores, factores muy positivos que dan pie a que cada vez más negocios decidan implementar dicho plan por medio de un software de RRHH como Sesame que incluye tarjeta de empresa de retribución flexible.
¿Qué es la retribución flexible?
Se trata de un programa retributivo que consiste en pagar en especie a los empleados de forma parcial. En concreto, el salario bruto anual en líquido debe abarcar un mínimo del 70%, por lo que la retribución flexible puede comprender un máximo del 30%.
Son numerosos los pagos en especie que pueden producirse, abarcando multitud de productos y servicios. Entre los más comunes se encuentra la guardería, siempre y cuando los peques tengan tres años o menos.
Otro que poco a poco va extendiéndose por las empresas españolas se resume en pagar la cuota del gimnasio como parte de la nómina que perciben los trabajadores. De esta manera se evita el sedentarismo y se logra que los empleados rindan al cien por cien al disfrutar de un óptimo estado de salud tanto física como mental.
Aunque ir al trabajo andando o en bicicleta es lo mejor para evitar ese sedentarismo que tan perjudicial llega a ser para la salud cardiovascular, en ocasiones es inviable, por ejemplo si la oficina está ubicada a mucha distancia del domicilio del trabajador. Es por este motivo que algunas empresas se decantan por la retribución flexible del coche o incluso el parking en las inmediaciones de las instalaciones.
A la lista de retribuciones flexibles hay que sumar muchas otras como formaciones, seguros de vida, transporte público y aquella que también está bastante extendida en nuestro país: los cheques restaurantes que no obligan al trabajador a pagar IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas), factor que da pie a empezar a hablar de las ventajas de este programa retributivo.
¿Qué ventajas se obtienen al implantar este plan retributivo en una empresa?
Habiendo mencionado recientemente el ahorro del IRPF, aprovechamos para empezar a traer a colación los aspectos positivos que guardan relación específicamente con los empleados, comenzando precisamente con el menor pago de dicho gravámen que se ven obligados a realizar anualmente. De hecho, en algunos casos como el de las guarderías, no hay ningún tipo de límite al respecto, lo cual es de agradecer sobre todo por parte de aquellos trabajadores que pretenden poder conciliar su vida laboral.
En lo que respecta a las empresas, también se benefician enormemente de la implementación de este modelo retributivo. En primer lugar, las bajas laborales disminuyen de manera considerable, puesto que el seguro médico de máximo 500 euros al año es de vital importancia para aplicar técnicas preventivas que eviten problemas de salud de mayor o menor gravedad.
Por otra parte, es destacable que los empleados acostumbran a permanecer una mayor cantidad de tiempo en la empresa que les retribuye su trabajo de manera flexible. Esto es debido a que se sienten más valorados que antes.
Tarde o temprano, el aumento de la motivación acaba derivando en otros aspectos positivos como el incremento de la productividad, uno de los más importantes en pleno 2025. Y es que en los tiempos actuales, hacer frente a un elevadísimo nivel de competencia es realmente difícil, pero todo cambia en caso de que la plantilla sea muy productiva.
Conviene destacar que este aumento de la productividad viene dado en cierta medida por evitar quebraderos de cabeza a los empleados. Y es que no se ven obligados a pensar en cómo cuadrar sus cuentas para llegar a final de mes, sino que el plan de retribución flexible se lo pone mucho más fácil, determinando el presupuesto máximo a gastar en productos y servicios como los anteriormente traídos a colación.
A todo ello hay que sumar la mejoría experimentada a nivel de branding. En efecto, una empresa que ofrece esta política retributiva suele ser vista con muy buenos ojos no solo por los potenciales clientes, sino también por los proveedores e incluso los inversores que están pensando en adquirir acciones de esa compañía.
En definitiva, implementar un programa de retribución flexible tarde o temprano acaba siendo amortizado con creces por la empresa que decide dar este paso. Así pues, no sorprende que paulatinamente vaya en aumento la cifra de negocios que optan por hacerlo, aprovechando las facilidades que dan programas de RRHH como Sesame y su tarjeta de empresa de retribución flexible.