Horacio Otheguy Riveira.
Dirigido a adolescentes, a partir de 15 años, las dramáticas situaciones de esta novela se implican en la densidad de las emociones de las chicas y chicos de estas edades, y lo hace con una claridad y sensibilidad de gran interés, tanto para los lectores de esa franja de edad, como para los adultos que recorran sus páginas.
Estos últimos pueden navegar con la certeza de que la historia -que parte de una tragedia familiar con madre asesinada por su pareja- les permitirá comprender mejor las alteraciones hormonales de quienes crecen con un pie en la infancia perdida.
Un trepidante tratamiento de lo emocional, al contrario de aquellos que piensan que son temas «demasiado» duros para los chavales, cuando en realidad ellos no paran de pensar y flotar en peores circunstancias a través de series e incluso comics.
Realismo, solidaridad y magia
En esta novela, el realismo de sus vivencias más angustiosas logra una fértil alianza con la magia de los cuentos.
El poder hipnótico de las fantasías que se instalan en vidas atormentadas para invocar renovadas esperanzas. Una trama muy fértil, ágil y sorprendente al destacar temas tan importantes como la solidaridad en amigos inesperados, el justo conocimiento de la lucha por la vida en situaciones difíciles.
Una maestría que aporta valores espirituales y éticos sin discursos, sin sermones, desde una naturalidad narrativa que la autora domina brillantemente.
La escritora y sus lectores permanecemos unidos ante el misterio del terrible silencio de Ainarita, «Princesa Midas», una búsqueda fascinante minada de conflictos e ilusiones, pues estas nos han de acompañar siempre, incluso -o más aún- cuando todo parece ir en contra, «como si anduviéramos rodeados de cuervos»…
Manuel es un anciano que recibe una terrible llamada: su hija, que vive a cientos de kilómetros de él, ha sido asesinada. Sus dos nietos, Unai, de 17, y Ainara de 7, quedarán a su cargo. La niña fue la que llamó a la policía cuando encontró el cadáver de su madre. Los tres deben acostumbrarse a su nueva vida, pero nada resulta fácil por culpa del trauma que arrastran. El mayor habla mucho a su madre muerta, la pequeña calla desde que llamó al 112 ante el cuerpo de su madre y su padre.
Para lectores a partir de 15 años. Editorial SM Número de páginas: 136.- Encuadernación: Tapa blanda.- Fecha de lanzamiento: 28/08/2025.-
Nuestra casa es un bosque quemado mil veces y mil veces revivido, porque nada puede detenernos.
Alba Quintas Garciandia (Madrid, 1994) es autora de novela, poesía y teatro, graduada en Humanidades por la Universidad Carlos III de Madrid. Su introducción en la literatura juvenil fue de la mano del Premio Internacional Jordi Sierra i Fabra con la novela Al otro lado de la pantalla (SM), que salió en 2012 y posteriormente se tradujo al alemán. Su mayor impacto se estableció por el estilo dinámico y a la vez conciso al tratar el ciberacoso. Un año después publicó Globe y en 2015 consiguió el Premio Extraordinario en el certamen de La Caixa/Plataforma Editorial por La chica del león negro (Plataforma Neo). En 2017 publicó La flor de fuego (Nocturna), sobre la matanza de Columbine. En La venganza de Ariadna (Nocturna, 2019), ahonda en las secuelas de una violación. Todos los crímenes en torno a la infancia le resultan material valioso para sus ficciones: historias que respiran y palpitan porque deja valioso testimonio sobre la libertad gravemente herida de jóvenes de diversas maneras violentadas, cuando no asesinadas. Temas muy fuertes narrados con singular sensibilidad y conmovedor talento.
