Eduardo Suárez Fernández-Miranda.
Tenía la impresión de que, si éramos fieles a la verdad (estoy hablando de la verdad artística, no de los hechos) y respetuosos —con la época, los lugares y las gentes— la obra resonaría en el presente; de que, paradójicamente, podríamos alcanzar una suerte de universalidad a través de lo específico. Deniz Camp.
El guionista Deniz Camp y el dibujante Stipan Morian colaboran en una “vasta, extensa y a veces alucinante historia alternativa de los Imperios soviéticos y estadounidense, vista a través de la agrietada lente del lenguaje de los superhéroes”.
Camp compagina su trabajo como historietista para el mercado independiente norteamericano, al mismo tiempo que colabora con los grandes sellos editoriales del mundo del cómic como Marvel y DC. Entre sus trabajos destacan The Ultimates, Absolute Martian Manhunter o Assorted Crisis Events.
Por su parte, Morian, dibujante croata, ha trabajado en diversos ámbitos de la animación, la ilustración y la escenografía teatral.
20th Century Men es su primer trabajo en común. Publicado originalmente en el año 2022, el cómic refleja las tensiones geopolíticas tan de actualidad. La realidad y la ficción se entremezclan en una historia ambientada a finales del siglo XX. Un heterogéneo grupo de superhéroes, genios, locos y activistas parecen avocados a la Tercera Guerra Mundial. Camp y Morian han recreado los campos de Vietnam durante la guerra, el despacho oval, las bases de espionaje rusas o un Afganistán arrasado en una guerra fratricida.
El cómic refleja en toda su crudeza la destrucción que ocasiona una guerra. Los autores relatan la historia desde distintos puntos de vista para hacernos comprender que no existe una sola verdad. Así, “un héroe ‘de hierro’ soviético, un presidente estadounidense aferrado al poder, un soldado ciborg con superpoderes, una mujer afgana empeñada en construir una vida mejor para su pueblo y un periodista en busca de la verdad” convergen en un escenario apocalíptico. En cierto modo, 20th Century Men refleja, de modo preocupantemente premonitorio, los conflictos territoriales en los que nos vemos inmersos en la actualidad.
