MONSTER: el manga definitivo

Y yo me paré sobre la arena del mar,

y vi a una bestia emerger del mar,

que tenia siete cabezas y siete cuernos;

y sobre sus cuernos diez diademas;

y sobre las cabezas de ella el nombre de blasfemia. […]

Y adoraron al dragón que había dado la potestad a la bestia,

y adoraron a la bestia, diciendo:

¿Quién es semejante a la bestia, y quién podrá lidiar con ella?

(Apocalipsis según San Juan 13, 1-4)

 

Así comienza el anime “Monster”, basado en el manga homónimo del guionista y dibujante japonés Naoki Urasawa.

Quienes lo hayan presenciado podrán dar fé de la cavernosa y gutural voz del narrador español que lee de modo pausado dicha cita bíblica generando un aura siniestra y de misterio, el aviso de que quienes se atrevan a continuar, transitaran un duro camino.

En un momento donde en los relatos del cine y el anime priman las soluciones mágicas, fantasiosas, rápidas, y de sencilla digestión, Monster se erige como una obra de arte que encontró, en su tiempo, una fisura para aparecer. Un relato complejo, denso, en donde prima la esencia de lo humano en un relato que funciona como una especie de excusa para exponer una parte de nuestro entorno y sus manejos. Una obra que nos interpela en todo momento sobre ¿Quién es el monstruo? y si existen “respuestas sencillas, únicas, fáciles” o si como decía Nietzsche “No hay hechos, solo interpretaciones”.

Desde sus modestos comienzos hasta su estado actual como una obra de referencia en la cultura del manga, “Monster” de Naoki Urasawa ha demostrado ser una joya literaria que trasciende las fronteras culturales y captura la esencia de la narrativa humana. Este extenso y complejo relato nos sumerge en un mundo de suspenso, moralidad y complejidad psicológica, solidificando a Urasawa como un maestro de su oficio y consolidando a “Monster” como una obra maestra del manga.

Etimología del término “MONSTRUO”

El término “monstruo” tiene su origen en el latín. Proviene de la palabra latina “monstrum”, que a su vez deriva del verbo “monere”, que significa “advertir” o “indicar”. En la antigua Roma, un “monstrum” no se refería específicamente a algo malévolo o a una criatura aterradora, sino más bien a algo inusual o extraordinario que se consideraba un presagio o señal divina.

En la antigüedad, un “monstruo” podía ser cualquier fenómeno natural, evento o criatura que se percibiera como extraordinario y que se considerara una manifestación de la voluntad de los dioses. No necesariamente tenía connotaciones negativas en sus orígenes.

Con el tiempo, el significado de la palabra “monstruo” evolucionó para incluir criaturas imaginarias, mitológicas o terribles que se desviaban significativamente de la norma.

En la obra de Urasawa “monstruo” no es tan solo algo negativo, sino además algo que es parte del ser humano. Tachar a un ser humano de “monstruo” es ailarlo, separarlo, decir que “ese ser” o esa persona no es un humano, sin embargo el planteo de Urasawa es un peldaño de honestidad superior, el ser humano -parafraseando a Pascal- «el hombre es un gusano y es un héroe; el hombre es una porquería y es una hermosura; el hombre es un ser trágicamente dual; es la suma de las imperfecciones y de las perfecciones»

Los orígenes de Naoki Urasawa

Naoki Urasawa, nacido en Tokio en 1960, ha dejado una huella indeleble en la industria del manga. Su habilidad para tejer historias intricadas, personajes profundamente desarrollados y explorar temas filosóficos complejos es evidente en toda su obra, pero alcanza su punto culminante en “Monster”. La narrativa de Urasawa es una danza magistral entre la intriga y la profundidad emocional, un viaje que lleva a los lectores a través de la mente de sus personajes y a través de los intrincados engranajes de la trama.

“Monster” se erige como un monumento a la habilidad de Urasawa para crear un suspenso que se mantiene constante a lo largo de sus 18 volúmenes. La historia sigue al talentoso cirujano Kenzo Tenma mientras se enfrenta a las consecuencias de una decisión moralmente angustiosa: salvar la vida de un niño prodigio o la del alcalde de la ciudad. Esta elección aparentemente simple desencadena una serie de eventos que envuelven a Tenma en una red de conspiraciones, asesinatos y dilemas éticos.

La maestría narrativa de Urasawa radica en su capacidad para mantener la tensión a lo largo de la trama sin sacrificar la complejidad de sus personajes. A medida que la historia avanza, cada personaje, incluso los aparentemente secundarios, se revela como una pieza esencial en el rompecabezas global. El lector es llevado a través de giros y vueltas inesperadas, constantemente cuestionando las motivaciones y lealtades de los personajes.

Personajes Complejos y Desarrollo Psicológico Profundo

“Monster” destaca no solo por su trama intrigante sino también por la riqueza de sus personajes. Urasawa no teme explorar las complejidades y contradicciones inherentes a la condición humana. El protagonista, Kenzo Tenma, es un ejemplo perfecto de esto. Inicialmente presentado como un médico virtuoso, su viaje a lo largo de la historia lo lleva a enfrentarse a sus propias decisiones y descubrir los matices morales que componen su personalidad.

Pero lo que hace que “Monster” sea excepcional es la galería de personajes secundarios, cada uno con sus propias motivaciones, traumas y luchas internas. Desde el enigmático Johan Liebert hasta la intrépida periodista Nina Fortner, Urasawa da vida a cada personaje con una profundidad que va más allá de las páginas del manga. Estos personajes no son simplemente peones en el juego de Urasawa; son reflexiones de la complejidad de la humanidad.

El desarrollo psicológico en “Monster” es un campo de batalla emocional donde los personajes luchan con sus monstruos internos. Urasawa utiliza el arte y la narrativa para sumergir a los lectores en las mentes de sus personajes, explorando temas como la identidad, la redención y la conexión humana. Cada diálogo, cada expresión facial, contribuye a un retrato maestro de la psique humana.

Exploración Profunda de Temas Filosóficos

“Monster” no es simplemente una historia de suspenso; es una meditación sobre la moralidad, la responsabilidad y la naturaleza del mal. Urasawa no teme explorar territorios oscuros y cuestionar las bases morales de la sociedad. A través de las acciones de Johan Liebert, el antagonista central de la obra, el manga arroja luz sobre la fragilidad de la moralidad y la facilidad con la que la línea entre el bien y el mal puede desdibujarse.

La relación entre Johan y Tenma es particularmente fascinante en este contexto. A medida que los dos personajes están entrelazados en un juego mortal, Urasawa plantea preguntas profundas sobre la naturaleza de la bondad, la maldad inherente y la capacidad del ser humano para desviarse hacia la oscuridad.

Impacto Cultural y Legado

El impacto cultural de “Monster” trasciende las fronteras de Japón. La obra ha sido traducida a varios idiomas y ha ganado reconocimiento mundial, consolidando a Naoki Urasawa como un autor venerado en la escena internacional del cómic. La profundidad temática y la complejidad de “Monster” han atraído a lectores de todas las edades y trasfondos, demostrando la capacidad del manga para abordar temas universales de manera accesible y emocionalmente resonante.

El legado de “Monster” también se refleja en la influencia que ha tenido en otros creadores de manga y en la industria en general. Urasawa ha establecido un estándar elevado para la calidad narrativa y artística en el manga contemporáneo. Su enfoque en historias maduras y complejas ha influido en una nueva generación de artistas y escritores que buscan explorar la profundidad de la experiencia humana a través del medio del manga.

Conclusión: Un viaje inolvidable a la oscuridad y luz de cada ser humano

“Monster” de Naoki Urasawa es más que un manga; es una epopeya que explora las complejidades de la moralidad, la naturaleza humana y la conexión entre las decisiones individuales y las consecuencias colectivas. A través de su narrativa cautivadora, personajes inolvidables y exploración filosófica profunda, Urasawa ha elevado el manga a un arte que trasciende las fronteras culturales y resuena con lectores de todo el mundo. “Monster” es una obra maestra que perdura en la memoria de aquellos que se aventuran en su oscuro y fascinante universo, dejando una marca indeleble en la historia del cómic japonés.