Haz el papel de chica

Àngels S. Amorós

Carina Chocano. Haz el papel de chica. Seda Editorial, abril de 2019 . 320 pp.  Premio Nacional de la Crítica 2017 en Estados Unidos; nominado al Premio PEN/Diamonstein Spielvogel de Ensayo. Un análisis del rol de la mujer en los medios de comunicaciónA partir de los 16 años de edad.

Alicia (Alicia en el País de las Maravillas) era gruñona, presumida, despótica y sentenciosa, y tenía un pronto muy fuerte. Hacía demasiadas preguntas y tenía un serio problema con la autoridad. Era una comedora compulsiva que engullía con ansiedad todo lo que le pusieran por delante. Actuaba como si tuviera el derecho divino a recibir explicaciones de los demás, a obtener el respeto ajeno y una casa bonita repleta de juguetes. Se ofendía con facilidad y a menudo se compadecía de sí misma. Era testaruda, protestona  y egocéntrica. No se parecía en nada a las protagonistas de los cuentos de hadas, ya fueran niñas o princesas. No me extraña que no me gustara. Comparada con Bella, Alicia era un monstruo. Era idéntica a mí.

En la actualidad abundan todo tipo de publicaciones dirigidas a visibilizar el papel de la mujer a lo largo de la historia en todos los ámbitos culturales, artísticos, científicos, tecnológicos, etc. Sobre todo destaca la literatura infantil y juvenil, pero también el ensayo. Una de las publicaciones más destacadas es: Haz el papel de chica: y otras historias irritantes que dicen a las mujeres quiénes son.

Estructurado en cuatro partes con varios capítulos, el libro presenta una profunda disección del rol de la mujer en los medios de comunicación de mano de Carina Chocano, una periodista con varios premios en su haber. Como en una línea del tiempo, la autora establece comparaciones entre momentos de su vida personal y los hitos relacionados con la lucha de la mujer para hacerse un sitio. Además, ejemplifica y enfatiza sus razonamientos con elementos y personajes de la cultura popular como Bugs Bunny o la revista Playboy.

En la primera parte: «Descenso a la madriguera del conejo», Carina  Chocano comparte sus primeras impresiones sobre la imagen de la mujer que transmitían las revistas de Playboy que ella revisó en su infancia y que tuvo especial trascendencia en la misma época que el movimiento femenino llegó a su apogeo y la periodista Judit Butler publicó El género en disputa. Es decir, entre mediados de las décadas de los 60 y los 70.

El charco de lágrimas» es el título de la segunda parte, donde la autora indaga en el cine y la película Pretty Woman, cuyo estreno coincidió con el fin de sus estudios universitarios, se erige como muestra de las virtudes de una prostituta afortunada. La protagonista de la película, interpretada por Julia Roberts, encarna el arquetipo de ingenua típico de la literatura francesa, que se mantiene al margen de los males del mundo: corrupción, drogas, falsedad, explotación, etc. y que al final tiene suerte. Nada que ver con La teniente O’Neil, interpretada por Demy Moore, sin vocación por la maternidad y que hace frente a sus problemas con el uso de la fuerza bruta

En «No habrías venido aquí» encontramos al Pigmalión de Ovidio como representante de una figura masculina que «domestica» y educa un bloque de marfil que Venus convierte en mujer. En este sentido, tenemos como ejemplos bastantes películas basadas en este mito donde el personaje principal crea una mujer artificial según sus intereses personales. Se trata nada menos de versiones de muñecas hinchables con más capacidades pero que no dejan de ser un «monstruo».

Y en «Una merienda de locos», los ejemplos son más actuales, pero igual de inquietantes por lo que respecta a la representación de las mentalidades comunes. La película de animación Frozen se convierte en un modelo de dos mujeres: una normal, Anna y otra peligrosa por sus poderes mágicos y su capacidad de enfrentarse a la autoridad, Elsa. Una historia que también es síntoma de las múltiples subversiones de los arquetipos de princesa. Pero eso sí, se prescinde de la boda y de sus obligaciones reales.

Despojados de su contexto histórico y social, los cuentos de hadas se solapan con la naturaleza humana, pero utilizar a Blancanieves como una lección práctica sobre género es un poco como utilizar a la Venus de Willendorf como referencia anatómica.

A los que gustan de subrayar frases que consideran imprescindibles van a necesitar muchos lápices. Tal vez no tan afilados ni atinados como la pluma de Carina Chocano, pero sí que serán capaces de transitar entre sus páginas como una verdadera guía de lectura, un canon sobre los libros, documentales, películas y otros géneros culturales que es necesario conocer para entender que pese a los muchos esfuerzos por devolver a la mujer el lugar que se merece en muchos ámbitos, todavía falta mucho por hacer, pero vamos por el buen camino.

 

Carina Chocano escribe para The New York Times Magazine. Su trabajo ha aparecido en revistas como New York, Elle, Vogue, Rolling Stone y muchas otras. Ha sido crítica de cine y televisión en The Los Angeles Times, Entertainment Weekly y Salon.com. Su libro Haz el papel de chica ha ganado el Premio Nacional de la Crítica 2017 en Estados Unidos y fue finalista del Premio PEN/ Diamondstein-Spielvogel. Peruana de nacimiento, ha vivido en Madrid y en la actualidad reside en Los Ángeles, California.

BLOG DE LA AUTORA: www.carinachocano.com

TWITTER: @YouPlaytheGirl

 

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