El TeatroscopioEscena

«La madre de Frankenstein». Almudena Grandes en una clase magistral de teatro

Horacio Otheguy Riveira.

Acompañada por gran parte del equipo de La casa de los espíritus, Carme Portacelli recrea el universo literario de la última novela que escribiera Almudena Grandes dentro de sus Episodios de una guerra interminable. En efecto, La madre de Frankenstein es la quinta obra, penúltima de una saga que no llegó a terminarse por prematura muerte de la autora. Con una muy fiel adaptación de Anna Maria Ricart Codina, Portacelli organiza una función intimista y a la vez de gran relieve audiovisual con cuatro protagonistas y cinco intérpretes en abanico de roles para graves conflictos sociopolíticos en los 50 de España, dentro de un manicomio para mujeres donde vive tocando el piano la mujer que mató a su hija Hildegart, personaje con varias obras y películas que intentaron analizarla, investigarla, recrearla: Aurora Rodríguez Carballeira (1879-1955), aquí a cargo de Blanca Portillo en una creación que le permite una variedad de registros sorprendente, a todas luces admirable: autoritaria, agresiva, tierna, dulce…

De aquel juicio a la asesina de su hija («Yo la cree, yo la destruí») una genial novela adaptada al teatro con gran desarrollo del lenguaje escénico.
Comienzo de la representación. Aurora (Blanca Portillo) asciende en un elevador tocando el piano de esta guisa: lucidez y enfermedad mental en una mujer tan despótica en su radical feminismo, como el régimen ultracatólico que dirige el país.
Blanca Portillo en una de las diversas fases por las que pasa su personaje. Detrás, Pablo Derqui, el psiquiatra que trae de Suiza un psicofármaco revolucionario que la Iglesia Española procurará impedir «para no corregir los designios de Dios sobre los locos».
Robo de niños ante la impotencia del psiquiatra. Una escena de pocas palabras con José Troncoso en uno de sus muchos personajes.
El doctor Velázquez observa fascinado el dulce rostro de la enfermera. Una atracción que crece a lo largo de la trama, muy bien lograda en la precisa composición de Macarena Sanz y Pablo Derqui.

Sin duda, una novela extraordinaria por el uso afinadísimo de realidad y ficción, indagando en la profunda diferencia entre salud y enfermedad mental en un contexto político fascista, desde una. ideología republicana de izquierdas, sin carácter mitinero, exhibiendo también las contradicciones y errores en episodios del bando perdedor de la guerra civil.

Variedad de personajes metidos en varias bocas de lobo con cinco intérpretes de amplia trayectoria, que en segundos transforman aspecto, voces y ambientes a su alrededor: Ferran Carvajal, José Troncoso, David Fernández “Fabu”, Gabriela Flores, Belén Ponce de León.

Hipnótica revelación de conocimientos clave en la historia española del siglo XX al galope de una novela apasionante que ahora revive a través de una puesta en escena con múltiples detalles alrededor de un magnífico reparto que aborda el mosaico creado por Anna Maria Ricart Codina, quien ha sabido desarrollar breves monólogos y diálogos dinámicos. El contexto espacial tiene magia, simbolismos, dentro de una coloratura poética en la que también destaca la música y el vestuario, detallista y sugerente.

«Lo mejor en España en 1954 es no abrir la boca. El silencio es el único valor seguro».

 

Texto Almudena Grandes

Adaptación Anna Maria Ricart Codina

Dirección Carme Portaceli

Reparto: Ferran Carvajal, Jordi Collet, Pablo Derqui, David Fernández “Fabu”, Gabriela Flores, Belén Ponce de León, Blanca Portillo, Macarena Sanz y José Troncoso

Espacio escénico Paco Azorín y Alessandro Arcangeli

Iluminación David Picazo (AAI)

Vestuario Carlota Ferrer

Coreografía y movimiento Ferran Carvajal

Música y espacio sonoro Jordi Collet

Audiovisuales Miquel Àngel Raió

Diseño de sonido Carles Gòmez

Ayudante de dirección Montse Tixé

Ayudante de iluminación Daniel Checa

Ayudante de vestuario María García Concha

Fotografías Geraldine Leloutre

Vídeo Bárbara Sánchez Palomero

Editorial Almudena Grandes Tusquets Editores

Producción Centro Dramático Nacional y Teatre Nacional de Catalunya

TEATRO MARÍA GUERRERO

2 thoughts on “«La madre de Frankenstein». Almudena Grandes en una clase magistral de teatro

  • Buenas noches,
    Me gustaría saber si cabe la posibilidad de que se pueda prorrogar. Gracias,
    Un saludo,

    Respuesta
    • En estos teatros del Centro Dramático Nacional nunca se prorroga, pues está toda la temporada definida. Lo que suele suceder con funciones de tanto éxito es que reaparecen en la temporada siguiente. Seguramente así sucederá.

      Respuesta

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